Inclusión

Fundación Iberdrola España y Proyecto Hombre ayudarán a 300 mujeres vulnerables

Ponen en marcha un programa conjunto dirigido a resolver situaciones de adicción.

Antonio Fernández (centro), delegado de Iberdrola en Andalucía, con el presidente del Patronato de Proyecto Hombre Sevilla, Antonio Fragero, y profesionales de la comunidad terapéutica y usuaria del programa
Antonio Fernández (centro), delegado de Iberdrola en Andalucía, con el presidente del Patronato de Proyecto Hombre Sevilla, Antonio Fragero, y profesionales de la comunidad terapéutica y usuaria del programaIberdrolaIberdrola

La Fundación Iberdrola España y "Proyecto Hombre" de la Fundación Centro Español de Solidaridad de Sevilla –una de las entidades seleccionadas en el Programa Social 2024– han puesto en marcha un programa que tiene como objetivo ayudar a mujeres en situación de vulnerabilidad. "Cuando la resiliencia es el camino para las MUJERES", como ambas entidades han denominado al proyecto, trata de favorecer la vida personal, la autorrealización e integración autónoma y satisfactoria de las mujeres en todos los ámbitos de su vida. Una vida donde su estabilidad familiar, social, formativa y laboral se consolide en un estilo de vida saludable incompatible con las adicciones. La financiación alcanzará los 40.000 euros con los que Fundación Iberdrola España beneficiará a alrededor de 50 mujeres y familias al año, con una previsión de 300 en los próximos cinco.

Por su parte, la misión de la entidad, sin ánimo de lucro, Proyecto Hombre Sevilla es prestar atención integral a personas y familias con problemas de adicciones, promoviendo su autonomía, desarrollo personal y su integración en la sociedad, además de la investigación y prevención de las drogodependencias y otras conductas adictivas.

De esta forma, el recién creado programa está destinado a aquella mujer con problemas de adicción, y que, además, presente dificultades asociadas al rol femenino, circunstancias como la ausencia de apoyo y acompañamiento familiar, cuenten con cargas familiares que les dificultan centrarse en sí mismas, o vivencias traumáticas de violencia de género, como abusos físicos, psíquicos y sexuales, prostitución, patología dual o miedos por perder la tutela de los hijos. Es por ello que muchas de las mujeres que participan en el proyecto provienen de diferentes casas de acogida.

El plan "Cuando la resiliencia es el camino para las MUJERES" se lleva a cabo en tres fases. Primero, el proyecto de adaptación y motivación, con el fin de conocer y valorar la realidad de cada persona, a través de entrevistas, itinerario terapéutico, talleres, convivencias y dinámica, seguimiento y acompañamiento. Todo lo necesario para conocerla. La segunda es el conocimiento personal, donde puedan tomar conciencia, potenciar la autoestima, fomentar las relaciones sociales, académicas y laborales, así como reforzar el contacto con su realidad sociofamiliar.

Finalmente, la tercera y última etapa consiste en potenciar la reincorporación sociolaboral. Afianzar y verificar un estilo de vida autónomo, basado en la toma de decisiones, consolidad la vinculación afectiva en el sistema familiar, facilitar los medios necesarios para la búsqueda de empleo y de vivienda. Todo ello para ayudar a la mujer, enriquecer, favorecer y facilitar su vida.