Dentro de las muchas actividades de ayuda y salvamento que a diario realiza la Guardia Civil de Navarra, puesta en el ojo del huracán por asuntos políticos, figuran numerosas actuaciones que, por su relativa trascendencia informativa, pasan inadvertidas, pero que dan idea del trabajo de los agentes de la Benemérita para atender cualquier tipo de situaciones.

Esta misma mañana, un ciudadano alertaba en el teléfono 062 de un perro que se encontraba en el arcén de la NA-132 km 19, próximo a la localidad de Larraga.

La Central Operativa de Servicios (C.O.S) desplazaba al lugar a la patrulla más cercana, que verificaba que este animal se encontraba herido en el arcén de la vía. Tras proceder a la lectura del microchip del can, hicieron gestiones para localizar al propietario, que manifestó que se le había escapado. Los agentes procedieron a hacer entrega del animal a su propietario.

En teoría, un hecho casi irrelevante pero que da idea de ese trabajo incesante de los agentes del instituto armado.