Menores de edad y mujeres representan el mayor porcentaje de las víctimas de fraudes a través de las redes

El fenómeno de la ciberdelincuencia no para de aumentar en toda Europa. Esta tendencia, según alertan las propias instituciones europeas, se agravará en el futuro, ya que se pronostica que alrededor de 41.000 millones de dispositivos estén conectados a Internet en todo el mundo en el año 2025.

El Ministerio del Interior ha publicado recientemente un Informe sobre la cibercriminalidad en España, en el que se confirma la tendencia ascendente de los ciberdelitos, así como su mayor peso proporcional en la delincuencia, que ha pasado de

representar el 7,5 % en 2018 a un 16,1 % en 2022.

En el último año del que se disponen cifras oficiales, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad de nuestro país registraron un

total de 298.319 perjudicados por alguna infracción penal contabilizada dentro del ámbito de la ciberdelincuencia. Aunque apenas existen diferencias en relación al sexo de la víctima (49,99 % pertenecen al sexo masculino y un 50,01 % al femenino), sí que resulta llamativo el dato referente a la nacionalidad de aquellas: el 87,2 % de las víctimas fueron españolas, y el 12,8 %

restante extranjeras. Para más detalle, en el conjunto de perjudicados de nacionalidad extranjera, las personas procedentes de Marruecos, Rumanía y Colombia fueron las que reunieron valores más altos.

La mayoría de las víctimas de ciberdelincuencia se sitúa entre 26 a 40 años, y son objeto, principalmente, de los delitos de fraudes informáticos, amenazas y coacciones y falsificación informática. Francisco José Peláez Ortiz, socio fundador de PenalTech, explica que, "tal y como se refleja en el documento divulgado por el Ministerio del Interior, las víctimas comprendidas en el grupo de menores de edad no continúan el patrón de los perjudicados mayores de edad".

El abogado subraya que "el fraude informático es el delito con mayor incidencia en todos los grupos de edad registrados, a excepción de los menores de edad". En concreto, las víctimas menores de edad "son más vulnerables a otra tipología delictiva, tal y como serían las amenazas y coacciones y los delitos de contenido sexual".

El estudio constata que la amenaza de la ciberdelincuencia sexual tiene más incidencia en los menores de edad de sexo femenino. Así, de las 1.135 víctimas de delitos sexuales, 954 fueron menores de edad y, de esta última cifra, 616 corresponden al sexo femenino.