
Entrevista
Noel Horcajada, influencer gastronómico: “No voy a decir que algo me gusta solo porque me paguen”
El creador de contenido revela que ha sido apartado de campañas publicitarias por otros influencers “más grandes”
Su nombre se ha hecho habitual en el feed de quienes disfrutan descubriendo nuevos restaurantes a golpe de TikTok. Noel Horcajada lleva más de seis años mostrando su pasión por la comida desde la cercanía y la naturalidad. Su contenido mezcla humor, curiosidad y criterio, algo que le ha permitido ganarse el respeto tanto de sus seguidores como de muchos chefs.
Ahora, con su nuevo proyecto visitando los menús universitarios de Madrid, continúa demostrando que la gastronomía también puede contarse desde lo cotidiano y lo honesto.
“Mi hermano fue quien me empujó a empezar el proyecto de los menús universitarios”
Pregunta: Estás llevando a cabo un nuevo proyecto probando los menús universitarios. ¿Cómo surgió la idea y cuál ha sido el más sorprendente hasta ahora?
R: Era una cosa que tenía en mente desde hace tiempo, pero la verdad es que fue mi hermano quien me insistió en empezar a hacerlo. Yo ya lo había pensado hace un año, pero necesitaba a alguien que me grabara y ser constante. Hace unos meses me dijo “vamos a hacerlo” y lo estamos cumpliendo. Está siendo muy guay porque vas a la universidad, la gente te conoce, los cocineros te conocen, y es muy guay. Y la que más me ha sorprendido hasta ahora te diría que es Farmacia, donde mejor he comido.
P. ¿De la Complutense?
R. Sí, de la Complutense. Me están pidiendo por el resto de España, pero de momento solo estoy yendo a la Complutense.
P. ¿Te ha pasado alguna vez tener una colaboración pagada con un restaurante que no te haya convencido?
R. Sí. Yo antes de ir a un sitio siempre intento ver reseñas, fotos, y comprobar si encaja con mi contenido. Sí que ha pasado que he ido a un sitio y no era lo que esperaba, y lo que hablo con ellos es que o publico el vídeo diciendo lo que quiero o no lo publico directamente. Todavía no he llegado al punto de aceptar una colaboración y decir que algo me gusta si no me gusta.
P: Si tuvieras que quedarte con tres restaurantes que realmente te han impresionado, ¿cuáles serían?
R: En el número tres te diría Bahía, en Cartagena, que ha cerrado. Era increíble, pero creo que era un concepto que en Cartagena no se entendía mucho. En Madrid, Gamán, del chef Luis Arévalo, de cocina Nikkei, japonesa y peruana. Y el primero, RabioXO, de Daviz Muñoz. Fui y me gustó muchísimo.
P. ¿Tienen un estilo parecido?
R: El primero, Bahía, no. Era más mediterráneo. Los otros dos sí, porque David hace cocina asiática y Gamán también.
P. De todo lo que has probado, ¿qué ha sido lo más raro que te ha gustado?
R: Igual algo de casquería. Yo la odio, pero en algún Estrella Michelin que te meten lengua o cosas así, me la he podido comer porque no estás viendo la lengua como tal.
P. ¿Y algo que no hayas podido comer?
R: La medusa. No sé qué tipo era, pero la textura es horrible, como un cartílago.
P: ¿Cómo ves el panorama actual de creadores de contenido gastronómico en España?
R: Me parece muy guay, pero también me da pena. Yo empecé hace seis años, y lo hice porque me gustaba, no por ganar dinero ni por comer gratis. En ese momento el ambiente era muy chulo porque era algo desconocido.
Ahora hay mucha gente nueva, lo cual está bien, pero también hay quienes empiezan pensando en ganar dinero. Y es triste, porque lo ideal sería hacerlo porque te gusta. Luego ya vendrá todo lo demás. Yo, por ejemplo, no empecé a monetizar hasta que tuve 100.000 seguidores. Primero quise hacer comunidad.
P: ¿Alguna vez te han acusado alguna vez de intrusismo por hacer crítica gastronómica desde redes?
R: Alguna vez, sí. Pero yo lo diferencio mucho. Después de comer en 500 restaurantes tienes un bagaje, pero no me considero crítico gastronómico. Yo voy, enseño lo que como y digo si me gusta. Es mi opinión, no una verdad. Y aunque hay personas sobre todo mayores o críticos que no lo aceptaban al principio, creo que ahora se están adaptando, incluso algunos se han unido a las redes.
P: Pruebas muchos platos cada semana. ¿Cómo lleva tu estómago ese ritmo?
R: Mal, ahora mismo mal. Durante estos seis años he comido de todo, y hace unos meses mi estómago petó. Estuve seis meses muy mal, me hinchaba incluso bebiendo agua. Ahora intento dosificar, ir con más gente o entender que no puedo comerme todo, por mucho que quiera. Antes iba a muchos más sitios para hacer más contenido, pero ahora soy más selectivo.
P: ¿Alguna vez has tenido una mala experiencia por comer demasiado?
R: Sí. En Rabioso, por ejemplo. Le escribí a David antes para pedir permiso para grabar, y llamó al restaurante para que nos sacaran más platos. El menú son 12, pero comimos 20. Fue la mejor comida y la peor digestión de mi vida. Salí queriendo vomitar, pero no lo hice porque me daba pena.
P: En el mundo del contenido gastronómico, donde hay tantos perfiles, ¿has tenido algún roce con otros creadores?
R: Sí, aunque no muchos. Yo voy un poco a mi bola, soy un chaval de barrio que hace esto porque me ha tocado, no porque lo buscara. Pero sí hay egos y envidias. No tengo trato con ciertos perfiles y no me voy a llevar nunca con ellos.
P: ¿Alguna anécdota concreta?
R: Sí. Me han tirado de publicidades. Perfiles más grandes que yo han visto que yo estaba en ese briefing y han dicho que si estaba yo, no lo hacían. Y me han echado.
“Hago esto porque me gusta"
A pesar de los obstáculos, Noel Horcajada mantiene su esencia, la pasión por comer y contar historias sin artificios. En un sector donde muchos buscan viralidad rápida, él apuesta por la constancia, la honestidad y una comunidad que confía en su criterio.
“No he empezado a hacer esto para ganar dinero ni competir. Lo hago porque me gusta. Si algo no me gusta, no lo voy a decir solo porque me paguen.”
✕
Accede a tu cuenta para comentar


