Así se gestó el «Watergate 2.0»
Una alerta de suplantación en el correo del jefe de campaña de Clinton desató las alarmas, pero EE UU descartó que se tratara de un virus. Un error que le costó la presidencia a los demócratas.
Una alerta de suplantación en el correo del jefe de campaña de Clinton desató las alarmas, pero EE UU descartó que se tratara de un virus. Un error que le costó la presidencia a los demócratas.