Empleo

Meta comienza a sustituir a sus empleados por IA: "No necesitamos tantos roles en algunas áreas como antes"

La tecnológica Meta se sumerge en una profunda contradicción: despide a sus expertos en riesgos para confiar en una inteligencia artificial que es, a su vez, una fuente constante de peligros y fallos para la compañía norteamericana

 Letrero con el logotipo de Meta cerca de la sede de Meta Platforms en 1 Hacker Way.
Letrero con el logotipo de Meta cerca de la sede de Meta Platforms en 1 Hacker Way.Dreamstime

Una promesa de eficiencia con un margen de error descomunal. Esa parece ser la carta de presentación de la inteligencia artificial en el mundo empresarial, donde su implementación, lejos de ser infalible, plantea serios interrogantes.

Una cuestión que se hace más evidente cuando se ven las cifras actuales de beneficio económico generado por la IA frente al gasto que supone, con ocho de cada diez empresas asegurando que no ven retorno en sus inversiones en esta nueva tecnología.

A pesar de su aparente sofisticación, estos sistemas pueden llegar a registrar una tasa de fracaso del 95% en su aplicación práctica, un dato que pone en tela de juicio la confianza ciega en la automatización de procesos críticos.

La contradictoria apuesta de Meta por la inteligencia artificial

Los ejemplos que ilustran esta fragilidad resultan casi cómicos y, a la vez, profundamente reveladores sobre los riesgos que entrañan. Uno de los casos más llamativos ocurrió en Estados Unidos, donde el chatbot de un concesionario de coches, operando sin supervisión, llegó a cerrar la venta de un vehículo nuevo por el ridículo precio de un dólar, una anécdota que evidencia la imprevisibilidad de estas herramientas.

En este contexto de incertidumbre tecnológica, Meta ha tomado una decisión que no acaba de estar en sintonía con lo que requieren los tiempos actuales, en los que la seguridad en el desarrollo debería primar; en lugar de ello, la compañía que lidera Mark Zuckerberg ha optado por sustituir a parte de su equipo humano dedicado a la gestión de riesgos por sistemas de inteligencia artificial.

Se trata de una iniciativa que se ha conocido gracias a la labor del medio Business Insider, quien tuvo acceso al memorando remitido por la compañía con sede en Menlo Park. En el escrito, firmado por Michel Protti, director de cumplimiento de Meta, se apunta al camino adoptado por parte de la tecnológica de avanzar hacia un proceso de riesgo automatizado:

"Como resultado, ya no necesitamos tantos puestos en algunas áreas como antes. Esta estandarización significa que muchas decisiones rutinarias ahora pueden ser manejadas eficientemente por la tecnología, liberando a nuestros equipos para enfocarse en los desafíos más complejos y de alto impacto"

Michel Protti, Director de cumplimiento y privacidad de productos de Meta

Sin embargo, este movimiento no es un hecho aislado y se enmarca en una estrategia que genera confusión. La decisión se produce poco después de que la tecnológica despidiera a cerca de 600 empleados de su laboratorio de Superinteligencia de IA, uno de sus proyectos más ambiciosos en este campo.

La suma de ambos anuncios dibuja un panorama lleno de interrogantes sobre el rumbo real de Meta en el desarrollo y la aplicación de una tecnología que, por ahora, parece tan prometedora como peligrosa.

Y es que, se trata de un movimiento que choca frontalmente con las crecientes advertencias sobre la fiabilidad de estos sistemas para tareas tan sensibles y que exigen un criterio experto.

Por su parte, la compañía defiende la medida como un paso lógico hacia la optimización de sus operaciones internas. La justificación, comunicada a la plantilla mediante un memorando del director de Cumplimiento, Michael Protti, argumenta que la automatización agilizará decisiones rutinarias.

Esto, según la empresa, permitirá al personal concentrarse en asuntos con un mayor potencial de negocio, aunque no se ha especificado la cifra exacta de empleos que se verán afectados por esta nueva política.