Tecnología militar
China ya tiene ‘robots lobo’ como fuerza de asalto en su ejército: detectan y eliminan al enemigo en 10 segundos
La plataforma cuadrúpeda pudo verse en un ejercicio militar que simulaba un desembarco en Taiwán
Los sistemas robóticos están cobrando un papel cada vez más importante en ejércitos de todo el mundo. Estados Unidos los ha estado probando, pero China lleva el camino más avanzado e incluso podría llegar a utilizarlos en un hipotético conflicto con Taiwán. Al menos, eso se desprende del ejercicio de entrenamiento que el Ejército Popular de Liberación (EPL) llevó a cabo el mes pasado. Según informó la Televisión Central de China (CCTV), el 72.º Grupo de Ejército del Mando del Teatro Oriental del EPL simuló un ataque contra Taiwán con un desembarco anfibio en el que empleó ‘robots lobo’ de cuatro patas trabajando junto a drones en ataques coordinados.
Este ejercicio es la primera exhibición pública de robots terrestres autónomos desempeñando funciones de asalto en vanguardia, una posición tradicionalmente ocupada por soldados y que supone un riesgo extremo durante los desembarcos en playa.
Los nuevos sistemas forman parte del esfuerzo del EPL por sustituir a tropas humanas en operaciones de primera línea especialmente peligrosas mediante sistemas no tripulados impulsados por inteligencia artificial. Las imágenes de CCTV mostraron a los llamados ‘lobos mecánicos’, desarrollados por la Corporación de Industrias del Sur de China (CSGC), avanzando a toda velocidad por una cabeza de playa antes que las tropas humanas.
Los robots, de 70 kilogramos y capaces de transportar hasta 20 kilos de suministros, fueron vistos rompiendo obstáculos y abriendo paso a las fuerzas que llegaban detrás, según recoge The Sun.
Algunas unidades estaban configuradas para el ataque mientras que otras se destinaban al transporte de munición y botiquines, además de proporcionar reconocimiento y fuego de apoyo. El ejercicio también incluyó enjambres de drones suicidas FPV que lanzaron ataques de precisión contra fortificaciones enemigas simuladas.
Menos de 10 segundos entre la detección a la destrucción
El ejercicio demostró un ciclo de ataque extremadamente rápido, reduciendo el tiempo ‘de detección a destrucción’ del objetivo a menos de 10 segundos. Los robots lobo de ataque despejaron trincheras en entre tres y cinco minutos, mientras que las variantes de transporte avanzaron inmediatamente detrás. En una secuencia, se mostró a un solo soldado controlando simultáneamente nueve robots lobo y seis drones mediante una interfaz de campo de batalla en 3D en tiempo real.
Además, la integración de elementos tripulados y no tripulados habría ampliado el radio de combate hasta cuatro veces en comparación con una escuadra de infantería estándar.
‘Lobos’ impulsados por IA
Esta plataforma cuadrúpeda está equipada con cinco cámaras para una conciencia situacional de 360 grados y ya había sido mostrada en el desfile militar del Día de la Victoria en septiembre junto a drones y helicópteros no tripulados.
Su uso demuestra cómo el EPL está cambiando sus tácticas, pasando del empleo de grandes cantidades de soldados -las conocidas ‘tácticas de oleadas humanas’- al uso de tecnología avanzada o ‘tácticas marítimas inteligentes’. Este nuevo enfoque hace hincapié en la automatización y en el trabajo en equipo entre máquinas, priorizando la precisión en lugar del número de tropas.
Debilidades de los ‘robots lobo’
El ejercicio demuestra que China planea desplegar robots impulsados por IA a gran escala para tareas complejas como asaltos anfibios, reconocimiento y logística. Sin embargo, la demostración también evidenció algunas debilidades.
Las imágenes mostraron a varios robots lobo teniendo dificultades para ocultarse en zonas abiertas. Carecían de blindaje y parecían vulnerables a armas ligeras. Uno de los robots fue destruido por fuego ligero durante el ejercicio. Comentaristas chinos reconocieron estas deficiencias, señalando que la prueba reveló que los robots no actuaron bien en situaciones defensivas.
Aunque los robots muestran potencial para funciones logísticas y de reconocimiento, su eficacia de combate sigue limitada por factores como la autonomía, el blindaje y la seguridad de las comunicaciones.