Polémica por el mensaje de Tamara Falcó a Pablo Iglesias: “Podemos, en Madrid no te queremos”

Tamara Falcó, Marquesa de Griñón, sigue levantando polvareda con sus opiniones en la sección “El debate” de “El Hormiguero. En su última visita este jueves, no dudó a tocar todos los palos y se atrevió a mandarle un “mensajito” muy directo al ex vicepresidente del Gobierno, y vertió opiniones muy cuestionables sobre la vacuna que está usando España, AstraZeneca.

A las puertas de las elecciones a la Comunidad de Madrid, Falcó quiso dejar clara su orientación política, y de paso, mandar un mensaje muy claro al candidato Pablo Iglesias. A la pregunta de Pablo Motos sobre sí entendían la decisión del ahora ex vicepresidente, y tras la opinión de Juan del Val, la marquesa sentenció: “Podemos, en Madrid no te queremos”.

¿Os pondríais la vacuna de AstraZeneca?”.

Tras la parte política llegó el turno para hablar de la polémica con las vacunas AstraZeneca que ha comprado España y el resto de Europa. La pregunta iba dirigida a los cuatro tertulianos del espacio, Cristina Pardo, Juan del Val, Nuria Roca y Tamara Falcó. Ante la respuesta afirmativa de tres de ellos, la Marquesa de Griñón dijo rotundamente “no, la de AstraZeneca, no”. Cuando el presentador le pidió explicaciones, la hija de Isabel Preysler aclaró que prefería la de Pfizer y que “las más afectadas” habían sido mujeres de entre 30 y 40 años, lo que no es cierto. Estos casos se dan en mujeres menores de 55.

Si bien es cierto que la mayoría de los casos de coagulación intravascular diseminada, el efecto más grave observado en vacunados de AstraZeneca cuya relación causal ha descartado la Agencia Europea del Medicamento -aunque seguiría investigándola- se han dado en mujeres, no ha sido entre las de 30 y 40 años, sino en las menores de 55.

Lejos de volver a la senda, Falcó también argumentó que una amiga suya le había dicho que con la vacuna de AstraZeneca “se contagiaba” la Covid-19. Cristina Pardo dudó de esto último. Para rematar Tamara creía que “son gratis” al preguntarle sobre su precio, a lo que luego sí rectificó... “ahhh, para el Gobierno”.