¿Quién es Álvaro, que revoluciona “La casa de los secretos”?

Como en la creación del Universo, al principio era la nada. Aparte de los concursantes de “La casa de los secretos” de Telecinco, era un intento muy sincero de recuperar audiencia emitiendo una edición de anónimos de un reality, para volver a la esencia. De momento, y aunque los espectadores no responden del todo, part de la prensa especializada y comentarios de Twitter demuestran que el formato gusta por sus participantes, que día a día son TT en la red social. Pero se sabía que había un enmascarado (parece ser que un búho) que no había desvelado su identidad. Hasta este domingo.

Álvaro parece tímido, normal y antes de que la audiencia supiere de su manera de relacionarse con los demás concursantes, los datos que se tenían eran contados. Según facilita la cadena de Mediaset, Álvaro “es interventor, tiene 27 años y es superdotado”. Hasta ahí todo normal.

Su trabajo lo desarrolla en Albacete, pero realmente4 es de Soto del Real (Madrid). Según su ficha ha estudiado Administración y Dirección de Empresas y Derecho; “pero en su currículum también podemos encontrar un año de ilusionismo. Fue en la magia donde encontró la forma de acceder a los sentimientos de la gente”, destacan. También sabemos que tiene una cuenta pendiente “con el amor”, porque todavía no ha encontrado con quien “tener esa parte afectiva”.

Pero llegó el huevo. La manera de tener inmunidad es llevando todo el día encima un huevo rosa de considerable tamaño que ha provocado recelos dentro de la casa. La llegada de Álvaro ha sido fría con varios concursantes mofándose de su gordura y su forma de ser. Insultos también por parte de Héctor, que ha quedado retratado, como le achacan las redes sociales.

Los problemas con sus compañeros han sido todos. Él se sintió atacado desde su llegada y enseguida se quedó solo en una casa que ya tiene sus primeras alianzas. La llegada del nuevo ha convulsionado la casa, le han tratado fatal y ni siquiera tenía sitio para su ropa. Aparte de que todos están deseando quitarle el huevo.