Podemos
Las grietas de Adelante Andalucía se ahondan y dejan en el aire su futuro electoral
IU y Anticapitalistas se acusan mutuamente de apropiarse de las redes sociales y de dinero. Rodríguez da por rota la confluencia pero luego llama a negociar
Una denuncia que podría parecer anecdótica, la de la apropiación por parte de miembros de Anticapitalistas de los perfiles en redes sociales de Adelante Andalucía, la etiqueta bajo la que concurrieron Podemos, Izquierda Unida (IU), Primavera Andaluza e Izquierda Andalucista en las elecciones autonómicas del 2 de diciembre de 2018, ha sido suficiente para evidenciar que los componentes de esa alianza están desalineados. Su interior nunca ha sido un vidrio en el que mirar para entender rápido de qué está hecho. Arrastran meses de movimientos internos por el control de la marca y las grietas se agravaron con la salida de Anticapitalistas de Podemos anunciada en febrero de este año. Han mantenido varios encuentros para abordar la situación, el último ayer, tras el cual la presidenta del Grupo Parlamentario de Adelante y ahora líder de Anticapitalistas, Teresa Rodríguez, ha dado por «rotas» las negociaciones sobre la confluencia. Una lectura que ha «sorprendido» a IU. Su responsable político de Comunicación, Javier Moreno, ha asegurado a LA RAZÓN que salieron de la reunión secreta «de una manera no muy diferente a la de hace dos semanas. No supuso ningún avance, pero tampoco un retroceso», ha aseverado, para encadenar que, de hecho, acordaron seguir intercambiando «propuestas para desbloquear la situación» a través de Telegram y, «a la vuelta del verano», continuar con las negociaciones. «Pero había gente que ya estaba jugando a otra cosa», ha lamentado Moreno, en referencia a que, mientras esa cita se desarrollaba, «cambiaron las claves de las redes sociales y eso no se hace en cinco minutos», ha condensado, para afear un gesto que considera una «usurpación» que «no es democrática ni ética».
Desde el ala de Anticapitalistas han replicado acusando a IU de haberse apropiado de unos 90.000 euros de las cuentas de las diputaciones de Huelva y de Málaga. Si bien, el coordinador de la coalición de izquierdas en la comunidad, Toni Valero, ha afirmado que su formación no se ha adueñado «de ni un céntimo que no le correspondiera» y que ha cumplido siempre con «los acuerdos económicos» pactados entre los integrantes de Adelante. Valero, como Moreno, ha apuntado a que Anticapitalistas paga ahora las consecuencias de haberse desgajado de Podemos, formación que lidera Pablo Iglesias en el ámbito nacional. Pero en el desencuentro hay otra «anomalía democrática», en palabras de los dirigentes de IU, latiendo en lo profundo: el partido encabezado por Rodríguez registró el último diciembre la marca Adelante Andalucía en el Ministerio del Interior y pretende que sea un partido instrumental con el que poder presentarse, por ejemplo, a las elecciones generales o europeas, e IU avisa de que «peleará el espacio de Adelante». Moreno ha trasladado a este periódico que ese nombre encierra más que «un grupo parlamentario –formado por 17 diputados, 11 de Podemos y seis de IU–». «Los miembros fundadores de Adelante Andalucía, que ahora mismo están fuera tanto de las redes sociales como del partido instrumental, tienen más del 90% de los cargos públicos, concejales, alcaldías, parlamentarios, diputados en Cortes...», ha recordado. En ese punto ha sostenido que no se puede acudir «a un debate en términos democráticos, con reglas de juego transparentes, pero con un botón nuclear». Se refería al planteamiento de que, «si llegamos a un acuerdo que nos conviene bien, y si no, el partido es mío».
«Si hay quien quiere un experimento político sin los socios que considera incompatibles con su proyecto nos parece muy bien, legitimo y respetable, pero eso no se puede llamar Adelante Andalucía, le tendrán que poner otro nombre», ha resumido. Con todo, desde IU y desde Podemos, cuya máxima dirigente, Martina Velarde, ha exigido a Anticapitalistas que rectificara el «golpe antidemocrático» vinculado a las redes sociales, han dejado la puerta abierta a retomar el diálogo para evitar el fin. Y ello, pese a lo que han entendido como una nueva ruptura del «marco de unidad y confluencia por la vía de los hechos», en este caso digital, y a la negativa a «mancomunar» el registro del partido con el conjunto de las fuerzas políticas que componen la coalición. «Una clara», a su juicio, «vulneración de los principios de horizontalidad, democracia interna y transparencia».
Rechazo al cogobierno con el PSOE
Ya por la tarde Rodríguez y las dirigentes de las formaciones andalucistas han difundido un vídeo en las redes sociales en el que hacen «un llamamiento» a la vuelta a las negociaciones que horas antes dieron por rotas para «continuar» el «proyecto necesario» que armaron a la izquierda del espectro político de la región. «El problema de fondo es decidir si Adelante va a reeditar en Andalucía el cogobierno de IU con Susana Díaz y si ejerce su derecho a construir un grupo andaluz en el Congreso confederado con otras organizaciones hermanas. Lo demás es relato», ha intentado redirigir Rodríguez vía tuit. Anticapitalistas y andalucistas rechazan ese escenario de pacto con los socialistas e insisten en convertir la confluencia en un sujeto político propio.
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