"Méritos e infamias"

Lo que esconden las llamas

Los desastres medioambientales evidencian la necesidad de alterar nuestro modo de vida sin contemplaciones ni paparruchas. Bajo la ceniza yace mucho más que tierra quemada

Un fotógrafo toma imágenes de una zona quemada por el incendio forestal en la Sierra Bermeja, en Málaga
Un fotógrafo toma imágenes de una zona quemada por el incendio forestal en la Sierra Bermeja, en MálagaDaniel PérezEFE

Tuvo que llegar el fuego para sellar un verano sin demasiadas desgracias. La pandemia actúa como una laca que absorbe, permite todo, pero también oculta las miserias menores. Arde la sierra en Málaga por trochas, oquedades, entre la pendiente por donde habitan los pinos y el matorral mediterráneo arrasando la belleza y la vida, lo que más nos duele a los andaluces. Otra vez la mano del hombre parece que está detrás de este desastre. Por mucho celo que se ponga, el pirómano sabe de lumbres y vientos para acabar con lo que habita en el monte y salirse con la suya.

Este fuego de Estepona no es una lasca ardiente más, forma parte de la cadena de desastres medioambientales que evidencian la necesidad de alterar nuestro modo de vida sin contemplaciones ni paparruchas. No se termina de enterar el ser humano de que no es ni el centro de nada ni el más guapo del barrio. Y en ese no acabar de verse como una criatura más, machaca la naturaleza sin entender que ya no hay vuelta atrás para este mono desnudo dotado de un cerebro paranormal. Que unas orcas ataquen veleros no es casual, ni este fuego de Sierra Bermeja. Tampoco lo son las recomendaciones de la OCDE para que no aumente la brecha entre los países europeos en materia de protección ambiental, ya que gran parte de los fondos de recuperación de la UE deben emplearse en mejorar la «educación verde» sin paños calientes.

No hablamos sólo de de salvar flores, animales y lagunas, no, lo hacemos para garantizar a la siguiente generación un espacio donde poder albergar alguna esperanza de futuro. Si es que la hay. Debajo de la ceniza yace mucho más que tierra quemada, también las posibilidades de crecimiento económico: la pandemia redujo la economía un 3,3% según datos del Fondo Monetario Internacional (FMI). ¿Saben cuál es la previsión para las próximas décadas por culpa del cambio climático? Pues la estimación para Europa alcanza el 10%. Queman esos siete puntos de miseria en su imaginación, ¿verdad?