Política

La sanidad vuelve a convertirse en caballo de batalla electoral en Andalucía

Moreno hace balance y recuerda que hay un 22 por ciento más de profesionales en el SAS que al inicio de la legislatura

El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno (en el centro), en el antiguo hospital militar de Sevilla
El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno (en el centro), en el antiguo hospital militar de SevillaEduardo BrionesEuropa Press

La sanidad pública marcó las anteriores elecciones andaluzas de 2018 y en esta inminente convocatoria vuelve a ser un factor determinante. Entonces, el fuerte descontento de pacientes y sanitarios –hubo una movilización social sin precedentes en contra de los recortes en este ámbito– fue uno de los detonantes de la salida de los socialistas de San Telmo. La «joya de la corona», en palabras de la ex presidenta Susana Díaz, se deterioró demasiado y el Gobierno andaluz erró con decisiones como las fusiones hospitalarias, que generaron muchas críticas entre los profesionales. Incluso la apertura del nuevo parque tecnológico de la salud de Granada –la puesta en marcha de un nuevo hospital siempre es una buena noticia para cualquier administración pública– se le volvió en contra a la Junta de Andalucía, con pacientes trasladados de un centro a otro en taxis.

El Gobierno andaluz de PP-Cs no ha estado exento de críticas por su gestión sanitaria. La pandemia del coronavirus puso a prueba el funcionamiento del sistema sanitario público, teniéndose que reorganizar servicios para atender el aluvión de casos en las sucesivas olas. La no renovación de 8.000 sanitarios de refuerzo y las tensiones que generó la sexta ola en la atención primaria pusieron en entredicho el trabajo realizado, a pesar de que la sanidad ha contado con inversiones hasta ahora desconocidas en los presupuestos autonómicos.

Ahora, cuando «es un secreto a voces que la legislatura se acaba», tal y como aseguró el presidente de la Junta, Juanma Moreno, es hora de hacer balance. Durante la inauguración de un nuevo bloque quirúrgico del antiguo hospital militar de Sevilla, un complejo que se ha convertido en emblema de la gestión sanitaria del Gobierno de coalición, el presidente andaluz recordó que la comunidad autónoma cuenta hoy con 131.000 profesionales, un 22 por ciento más respecto a 2018. «Se han estabilizado dos de cada tres empleados del Servicio Andaluz de Salud», aseguró, además de señalar que «vamos cerrando la brecha salarial con la media de España». La consolidación del complemento de exclusividad de los sanitarios ahonda en este extremo, gracias al acuerdo alcanzado esta semana para mejorar las condiciones de 72.000 trabajadores del SAS. Se trata de demandas «históricas», tal y como apuntó Moreno, como la extensión de la carrera profesional a todas las categorías, el aumento de sueldo de los enfermeros de hospitales, matronas y técnicos de rayos y el complemento de continuidad asistencial de atención primaria «para que los médicos que lo deseen puedan trabajar por la tarde cobrando más».

En cuanto a las infraestructuras, el presidente andaluz aseguró que esta semana se ha estrenado el edificio sanitario número 33 de esta legislatura. «Hemos apostado por la modernización de la sanidad pública con inversiones como nunca en infraestructuras», afirmó. Tan solo en Sevilla, desde 2019 la Junta ha invertido 200 millones en reformar y abrir centros sanitarios. Desde que el Gobierno del cambio llegó a San Telmo se han abierto seis nuevos hospitales, seis centros de día, nueve centros de salud y otros nueve consultorios.

El antiguo hospital militar de Sevilla, dedicado a atender a pacientes covid durante los meses más duros de la pandemia, es el reflejo de un modelo «de desbloqueo de proyectos paralizados y abandonados». En este punto, Moreno puso otros ejemplos, como el hospital de la Cartuja en Sevilla, el Costa del Sol, el tercer hospital de Málaga, el materno-infantil de Almería o el Costa Occidental de Huelva, ubicado en la localidad de Lepe.

«Tras casi 20 años, el Militar ha pasado de un edificio en ruinas a hospital de vanguardia, con ocho plantas recuperadas y camas y servicios funcionando o a punto de hacerlo este verano. Todo, en menos de dos años», señaló.

Moreno aseguró que «muy pronto» estarán terminados el Hospital de Día y la Unidad de Salud Mental, que presenta dos novedades: un área para adolescentes –de 14 a 18 años– y un programa ambulatorio de nueva creación para pacientes con patología mental de difícil tratamiento, con técnicas de última generación.

También incidió en que la apuesta de su gobierno por el hospital militar ha sido «siempre firme», con una inversión de más de 72 millones de euros. Asimismo, destacó su «papel clave» en los peores momentos de la pandemia, cuando se convirtió en Hospital de Emergencias Covid-19. Actualmente, con las dos fases de obra finalizadas, el edificio dispone de ocho nuevas plantas hospitalarias, 320 camas de hospitalización y una Unidad de Lesionados Medulares. La nueva área quirúrgica cuenta con 17 quirófanos.