Rechazo
Cruzada de Sumar en Andalucía contra los menores en los toros
Justifica su oposición en que los festejos «provocan una reacción de rechazo, apuro y miedo»
«La violencia en el ruedo provoca una reacción de rechazo, de apuro y de miedo, así como una debilitación del sentido moral al ser presentada la violencia y el sufrimiento de un ser vivo como una condición necesaria para el goce de los demás». En estos términos se expresa Por Andalucía, la delegación andaluza de Sumar, que ha registrado en el Parlamento autonómico una proposición de ley en la que plantea modificar la Ley de Espectáculos Públicos con el objetivo de prohibir la asistencia de menores a las corridas de toros.
El momento elegido para presentar esta propuesta no es aleatorio, justo después de la icónica corrida del Domingo de Resurrección en Sevilla y justo antes del comienzo del ciclo continuado de festejos con motivo de la Feria de Abril. Con el seguro rechazo del PP y Vox, y el posible apoyo del grupo Adelante Andalucía, está por ver el posicionamiento del PSOE, un partido que se ha mostrado tibio en relación a los toros. Un asunto en el que muestra adhesión o rechazo dependiendo de la comunidad que se trate.
Según la diputada de Por Andalucía Esperanza Gómez, la petición se basa en «los cambios producidos en la sociedad española y en las recomendaciones que en diferentes ocasiones se han hecho desde la Asamblea General de las Naciones Unidas, que piden proteger a la población en edad infantil y juvenil de toda información y material perjudicial e inculcar el respeto del medio ambiente natural». Más concretamente, hablando de la tauromaquia, según Por Andalucía, el Comité de los Derechos del Niño de la ONU se pronunció en el año 2018 sobre los espectáculos taurinos, instando a los países donde se celebran a prohibir la participación de los menores como toreros y como público «para prevenir los efectos nocivos para los niños del espectáculo de los toros».
En Andalucía, el Gobierno autonómico ejerce las competencias en la ordenación de espectáculos públicos, incluidas las representaciones taurinas, por lo que puede establecer una edad mínima de participación en los espectáculos taurinos, según Gómez, que apuntó que el debate sobre los efectos nocivos sobre los menores «se mantiene abierto desde hace décadas».
La diputada añadió que la Junta de Andalucía, a través de la Consejería de la Presidencia, mantiene un presupuesto de 60.000 euros en subvenciones para aquellos municipios de la comunidad que soliciten y adquieran la condición de «municipio taurino». Dicha cuantía, según Por Andalucía, se divide en ayudas de hasta 2.500 euros y serán dadas para actuaciones que acerquen la tauromaquia a la ciudadanía en general «y a la juventud, en particular».
Precisamente, el Consejo de Gobierno dio luz verde recientemente al nuevo Reglamento Taurino de Andalucía, que busca la adecuación a la normativa sobre libertad de acceso a las actividades de servicio y su ejercicio, así como agilizar el procedimiento de autorización previa de los espectáculos taurinos mediante la eliminación o simplificación de trámites. En este sentido, Andalucía es pionera a la hora de legislar sobre el mundo del toro, creando una nueva reglamentación que actualiza la hasta ahora vigente en aras a la protección de los valores éticos y estéticos de la tauromaquia, asegurando la promoción de las fiestas populares y amparando los beneficios medioambientales y económicos. Entre las principales novedades del texto, destaca la inclusión de los tentaderos públicos como una nueva clase de espectáculo.