Las pymes rurales recibirán asesoramiento ambiental

La escasa capacidad financiera, el envejecimiento de los jefes de explotación o la escasa diversificación empresarial son algunas de las razones que explican el déficit en innovación de las actividades productivas del medio rural para mejorar el comportamiento ambiental, que es uno de los problemas detectados en el diagnóstico del Programa de Desarrollo Rural de Andalucía. Para intentar atajarlo, la Consejería de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul va a ofrecer un servicio de asesoramiento en la materia, que se considera «clave» en el respeto del medio ambiente y la capacidad de adaptación al cambio climático de las explotaciones y empresas vinculadas a las zonas agrarias de la comunidad. Se considera que, de esta forma, se promociona el desarrollo local, se mejoran los resultados económicos de las empresas sobre la base de la conservación y mantenimiento de la biodiversidad de su entorno y se cumple, además, con una «prioridad transversal» indispensable para lograr los objetivos de la política rural europea.

La Junta está licitando un contrato por valor de 636.000 euros, con fondos del Feader, para que pequeñas y medianas empresas del mundo rural reduzcan su impacto sobre el medio ambiente, acercando instrumentos voluntarios de control ambiental como el Etiquetado Ecológico Europeo-Ecolabel o el Registro EMAS; informando sobre herramientas que permiten medir y reducir la huella de carbono para reducir y actuar contra el cambio climático, contribuyendo así a un mayor nivel de protección del medio ambiente, mejorando los resultados económicos de las pymes ; y también se contemplan asesoramientos para explotaciones ganaderas destinadas a la cría intensiva de aves de corral o de cerdos en materia de responsabilidad medioambiental y mejores técnicas disponibles, al considerarse estas un factor clave para el desarrollo sostenible en la agricultura, pues mediante la adopción de las mejores prácticas y la evaluación de riesgos, el sector ganadero puede reducir sus impactos ambientales y ser más eficiente en el uso de los recursos.

Se calcula que el valor de los servicios ofrecidos a las empresas puede alcanzar hasta los 1.500 euros. En materia de responsabilidad medioambiental se ofrecen varios tipos de asesoramientos. El primero de ellos consistirá en la realización de un diagnóstico inicial que permitirá identificar los principales parámetros para la determinación del daño medioambiental de la actividad. Así, se recogerá información relativa a: descripción de las actividades, la caracterización del entorno en el cual la instalación se encuentra ubicada, la descripción de las Instalaciones; la identificación de los aspectos ambientales más relevantes de la explotación; la identificación de los posibles agentes causantes de daño y de los recursos y servicios afectados; y la identificación de las principales disposiciones legales que afectan a las instalaciones del sector y que pueden tener influencia en la caracterización de los riesgos medioambientales. La ejecución del contrato de asesoramiento ha de producirse antes de finalizar 2024.

En el trasfondo del este déficit de las zonas rurales subyace la falta de digitaliización de las empresas. Andalucía se encuentra por debajo de la media española en cuanto a la adquisición de competencias digitales. De hecho, según la Encuesta sobre equipamiento y uso de tecnologías de información y comunicación en los hogares del INE del año 2021, un 40,9% de la población andaluza no posee competencias digitales al menos básicas, frente al 35,8% de media nacional. Además, existe una brecha territorial entre las zonas rurales y las urbanas de 7 puntos de diferencia.

El registro SACE no engancha a las empresas

Una de las cuestiones que aborda el asesoramiento a las pymes rurales es la posible inclusión en el registro del Sistema Andaluz de Compensación de Emisiones (SACE), cuyos datos son bastante pobres a 31 de diciembre de 2022. Según los datos consultados, solo figuran en este registro 161 organizaciones y 270 cálculos de huella de carbono. En los tres últimos meses sólo se han inscrito 12 empresas. El presidente Juanma Moreno anunció en noviembre la creación del sello «Carbono Zero» para distinguir a entidades y eventos que logren alcanzar la emisión neta nula de emisiones. Otro incentivo por ahora en el aire.