Galardones

Reconocimiento al compromiso andaluz con la sociedad

El Museo Carmen Thyssen Málaga acogió la undécima edición de los Premios Valores de LA RAZÓN

La consejera de Empleo de la Junta de Andalucía, Rocío Blanco, junto a la periodista Isabel Gómez, durante un momento de la gala, ayer en el Museo Carmen
La consejera de Empleo de la Junta de Andalucía, Rocío Blanco, junto a la periodista Isabel Gómez, durante un momento de la gala, ayer en el Museo Carmen Kiko Hurtado

El XI Premio Valores de LA RAZÓN volvió a dar luz, visibilidad y reconocimiento a la solidaridad y al compromiso andaluz con la sociedad. Por undécimo año consecutivo, durante la noche del 14 de marzo, el Museo Carmen Thyssen Málaga fue testigo de la entrega de los premios a tres entidades cuya labor es imprescindible en el tejido social nacional y andaluz y que destacan por su contribución y compromiso en sus respectivos campos de acción. Así las cosas, los tres galardonados fueron la Asociación Española contra el Cáncer, el Centro EDAU–Educación en Autismo y la Asociación Altamar.

El Premio Valores reconoce cada año la iniciativa, el trabajo y la dedicación de todas aquellas entidades, instituciones y voluntarios que hacen de Andalucía un lugar más justo, igualitario y seguro y que, normalmente, están a la sombra con un gran equipo de profesionales y voluntarios que trabajan de forma «anónima» para cambiar el mundo. Al evento acudieron más de un centenar de representantes del ámbito social, empresarial y político andaluz. Entre ellos, la gala contó con la presencia de la consejera de Empleo, Empresa y Trabajo Autónomo de la Junta de Andalucía, Rocío Blanco; la vicepresidenta tercera de la Diputación de Málaga, Antonia Jesús Ledesma; y el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre; además del delegado de LA RAZÓN en Andalucía, José Lugo.

Foto de autoridades y premiadas del XI Premio Valores de La Razón
Foto de autoridades y premiadas del XI Premio Valores de La RazónKiko Hurtado

La periodista Isabel Gómez fue la encargada de conducir un acto que, según expresó, «premia y reconoce a asociaciones y organizaciones que realizan el mejor de los trabajos posibles: la dedicación y la ayuda hacia los demás». Asimismo, puso el foco en los problemas que sufre la sociedad, especialmente con la enfermedad del cáncer. «Perdí a mi hermano mayor hace casi tres años. Y desde hace tiempo me asocié a la Asociación Española contra el Cáncer, que hoy recibe uno de los premios que se conceden», afirmó durante un emotivo momento de su discurso.

La vicepresidenta tercera de la Diputación de Málaga, Antonia Jesús Ledesma, señaló que estos premios muestran «cuáles son los valores que merecen ser destacados y aquellos que sirven de ejemplo a la sociedad». Asimismo, destacó la importancia del voluntariado y la difusión de la actividad de este tipo de asociaciones. «Las administraciones públicas realizan una gran labor social que se complementa con los colectivos sociales», añadió Ledesma, que no quiso dejar pasar la ocasión para reivindicar que todo el trabajo que realizan estas entidades y las personas voluntarias es un acto de «respeto hacía los demas y a nosotros mismos».

La consejera de Empleo, Empresa y Trabajo Autónomo de la Junta de Andalucía, Rocío Blanco, dedicó unas emotivas palabras en las que recordó que «una sociedad desarrollada, además de liderar el campo económico, necesita tener entidades dedicadas al tercer sector», algo que, según afirmó, en Málaga es una realidad. «Málaga y su provincia son innovadoras y lideran muchos de los campos económicos, pero una sociedad también se tiene que liderar desde el punto de vista de la igualdad. Es un reto en el que la administración y la sociedad civil tienen que confluir», opinó. Por otro lado, puso en valor el trabajo de aquellos voluntarios que trabajan cada día desinteresadamente por una sociedad mejor. «El voluntariado es imprescindible en una sociedad como la de hoy», señaló Blanco, para mostrar la importancia de todas aquellas personas que «desarrollan su trabajo de forma callada y anónima».

El primer galardón de la noche lo recibió la Asociación Española Contra el Cáncer. El objetivo de la entidad es aliviar y evitar el sufrimiento en las personas producido por el cáncer, cualquiera que sea su lugar de residencia y sus circunstancias personales. Además, la entidad ha enfocado sus esfuerzos en aumentar la supervivencia en cáncer, con el objetivo de alcanzar un 70% de supervivencia en 2030. María Cortina Aurrecoechea, consejera nacional de la asociación, recogió el premio en nombre de la institución. Durante su intervención, recordó que «uno de cada tres hombres y una de cada tres mujeres van a tener cáncer a lo largo de su vida». Ante esta situación, que catalogó de «tremenda», explicó que el gran reto de la AECC es «alcanzar en 2030 el 70% de supervivencia». Para ello, Cortina anunció que, además de impulsar la investigación a través de una «inversión de 114 millones de euros en 603 proyectos en los que han participado 1.500 investigadores», es igual de importante «la prevención y detección precoz», lo que, según indicó, podría evitar el 50% de los casos de cáncer.

El segundo premio fue a parar a la Asociación Altamar. Esta entidad, que se encuentra en el barrio de La Trinidad y El Perchel, nace de la iniciativa de un grupo de mujeres en 2005. Desde entonces, han ofrecido apoyo y educación integral a más de un centenar de niños y niñas, además de asistir las necesidades de sus familias en riesgo de exclusión. Actualmente, atiende a un total de 44 niños, entre cinco y 16 años, que pertenecen a unas 25 familias. El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, entregó el premio a Victoria Marín y María Silvestre, la directora y presidenta de Altamar. Marín agradeció el galardón a LA RAZÓN e informó de que en Altamar atienden a «170 usuarios a través de diferentes proyectos para favorecer la inserción social de niños en familias en situación de vulnerabilidad». Asimismo, resaltó que «dentro de la complejidad y del drama que viven las personas que atendemos en los programas, es una suerte que cada día podamos encontrar un ejemplo a imitar a través de los valores que nos enseñan». Después, dio a conocer el caso de real de un chico –presente en el acto– que ha crecido con la entidad y el gran trabajo que hacen «las madres y padres de nuestros niños que quieren romper con su situación de pobreza y se esfuerzan en dar una mejor atención a sus hijos cambiando los hábitos familiares».

El último premio fue concedido a EDAU–Educación en Autismo, un centro de recursos especializado para personas con trastorno del espectro autista que se ha convertido en una entidad prestadora de servicios de referencia de la provincia, concretamente en Antequera. Su lema, «tan diferente como tú», se complementa con el objetivo de que las personas con autismo tengan oportunidades de futuro y una vida plena. La presidenta y fundadora de EDAU, Carolina Parra, recibió el premio de manos de la vicepresidenta tercera de la Diputación de Málaga, Antonia Jesús Ledesma, y del concejal de Bienestar Social de Antequera, Alberto Arana. Parra, comenzó su intervención contando la historia del centro asegurando que «la vocación es lo que nos une» y la razón de hacer posible el sueño de crear EDAU. Por otro lado, reivindicó una sociedad «más justa» con las personas con autismo en la que puedan tener las mismas oportunidades que los demás. Asimismo, abogó por la colaboración entre el tercer sector y las administraciones públicas para acabar con las carencias que arrastra el sector y el colectivo.

El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, cerró el acto elogiando la labor de las instituciones galardonadas y «lideradas por tres heroínas» que protegen, según expresó, «valores que cada día son más necesarios en nuestra sociedad». Además, recordó la importancia del XI Premio Valores LA RAZÓN, que reconoce cada año a las entidades sociales de Málaga. «Nos quedan muchas cosas por hacer desde la administración», aseguró, para indicar después el «valor» real del tercer sector.

El evento contó con el patrocinio del Ayuntamiento de Málaga, la Diputación Provincial de Málaga, Helvetia Seguros y el Museo Carmen Thyssen Málaga, además de la colaboración de Alabardero Catering & Experiences, Cervezas Victoria y Molina Lario.