El mundo animal nunca deja de sorprendernos. Cada especie ha desarrollado comportamientos únicos para sobrevivir: desde camuflajes impresionantes hasta técnicas de caza sofisticadas. Algunos animales cooperan en grupo, otros usan herramientas, y varios demuestran habilidades cognitivas que desafían todo lo que creíamos saber sobre su inteligencia.

Pero hay comportamientos que van aún más allá. Algunos tan inesperados que parecen sacados de una película de ciencia ficción. En los últimos años, investigadores han documentado en Australia aves rapaces que propagan incendios de forma intencionada para facilitar la caza de sus presas.

¿Qué son las aves piromanas?

Estas aves no encienden fuego por accidente. Lo hacen porque han aprendido que el fuego es una herramienta útil para conseguir alimento.Cuando se desata un incendio, pequeños animales como roedores, insectos y reptiles salen de sus escondites, convirtiéndose en presas fáciles para las aves. Al extender las llamas, estas rapaces amplían su territorio de cazay aumentan sus posibilidades de éxito.

Este fenómeno ha sido especialmente observado en Australia, donde especies como el milano negro (Milvus migrans), el milano silbador (Haliastur sphenurus)y el halcón pardo (Falco berigora)han sido vistas recogiendo ramas encendidas o humeantes de incendios activos y soltándolas en zonas aún no quemadas. De esta forma, provocan nuevos focos de fuego de forma deliberada.

Lugares donde ocurre este fenomeno

Los primeros en advertir este patrón no fueron científicos, sino comunidades indígenas del norte de Australia. Para ellos, estas aves, conocidas como "halcones de fuego",forman parte del conocimiento ancestral sobre la tierra. Lo que ahora la ciencia empieza a estudiar, ellos lo conocen desde hace generaciones.

Aunque la mayor parte de los estudios provienen de Australia, también se han reportado comportamientos similares en otras regiones del mundo, como Papúa Nueva Guinea, Brasil, Panamá, África e incluso Estados Unidos. En todos los casos, las aves muestran una capacidad asombrosa para identificar incendios y manipular el fuego a su favor.

¿Qué significa esto para la ciencia?

El descubrimiento de los “halcones de fuego” rompe con una de las ideas más arraigadas en la ciencia, y es que solo los humanos usan el fuego como herramienta. Estas aves no solo lo entienden, sino que lo manipulan a su favor. La inteligencia detrás de este acto revela una capacidad de adaptación que pone a prueba nuestros propios límites de comprensión sobre el reino animal.

Además, el fenómeno plantea nuevos desafíos para la gestión de incendios forestales. Si ciertas aves son capaces de propagar fuegos, ¿cómo afecta esto a las estrategias de prevención y control?