Animales

Así es el reptil que tan solo puede sobrevivir en las Islas Baleares

Tan solo está presente en en islotes costeros de Mallorca, Menorca y del archipiélago de Cabrera

Imagen de un reptil
Imagen de un reptilLa Razón

España es un país repleto y muy variado en cuanto a biodiversidad reptil se refiere. Las áridas zonas del sureste, las zonas costeras, las montañas en el norte... en todos estos espacios se encuentran lagartos, culebras, eslizones y muchos otros que han tienen que adaptarse a muchos hábitats y muy diferentes. Todo esto tiene una explicación muy clara.

Por un lado la amplitud climática y, por el otro, la amplia cartilla de ecosistemas. En este sentido, algunos de los espacios que primero se vienen a la mente son las costas, los bosques, los páramos, los humedales y, por supuesto, los islotes. Cabe destacar también que estos escenarios han sufrido transformaciones según han ido avanzando los años y, a su vez, se ha favorecido a ese surgimiento de nuevos micro-hábitats.

Un ejemplo muy claro de ello son las lagartijas, las cuales se resguardan en zonas rocosas soleadas, en zonas húmedas de montaña y en llanuras agrícolas o zonas forestales. No obstante, también destaca la singularidad de ciertos reptiles que sólo viven en un territorio muy limitado y que resultan muy valiosos.

El Podarcis lilfordi, conocida comúnmente como la lagartija balear

Dentro de este tema, un caso muy claro es el del Podarcis lilfordi, conocida comúnmente como lagartija balear. Se trata de una especie totalmente endémica del archipiélago balear y, únicamente, se la puede detectar en islotes costeros de Mallorca, Menorca y del archipiélago de Cabrera, según el informe del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) sobre anfibios y reptiles.

Más detalladamente, se la ha visto en 11 islotes de Mallorca y en 15 poblaciones menorquinas. Por su parte, en Cabrera transita por la isla principal y por 16 islotes de los alrededores. En cuanto a las islas principales (tanto Mallorca como Menorca), la especie quedó extinguida hace alrededor de 2.000 años.

Sus sitios favoritos: las playas de arena, el litoral rocoso o el interior de las pequeñas masas forestales

Su hábitat es muy concreto. Al ser animales de costa, sus lugares favoritos son las playas de arena, el litoral rocoso o el interior de las pequeñas masas forestales. En cuanto a su supervivencia, hay que puntualizar a que irá en función del aislamiento de estos espacios. Si están rodeados de especies depredadoras o incluso competidoras, se sentirán muy incómodos. Sus principales amenazas tienen que ver con las características de sus alojamientos. En primer lugar, si están en un espacio poblacional muy reducido, esto podrá traerles problemas genéticos.

Continuando con el tema de los habitantes, si estos visitan en mas aquellas zonas en las que se resguardan estos animales, se podrá alterar su aislamiento. Por otro lado, el deterioro del hábitat será un factor muy en contra para estos reptiles. La destrucción de la vegetación de los islotes por otros animales afecta los recursos tróficos y el hábitat de la especie. En cuanto a la metodología de conservación del Podarcis lilfordi, se han declarado zonas de protección el Parque Nacional Marítimo‑Terrestre del Archipiélago de Cabrera y los parques naturales de Sa Dragonera y de s’Albufera des Grau, que son los que aseguran mejor protección para poblaciones de la especie.