Educación

Los primeros en volver a las clases podrían ser los estudiantes de cuarto de la ESO y segundo de Bachiller

El nuevo calendario para los procedimientos de admisión en Castilla y León se publicará en mayo

Los colegios podrán abrir el mes de julio para ofrecer a los estudiantes clases de refuerzo
Durante las vacaciones es posible compaginar ocio y estudioEduardo ParraEuropa Press

La incertidumbre sobre el avance del tercer trimestre en los centros educativos continúa a pesar de los datos conocidos a lo largo del día de hoy, debido a que muchas de las variables dependen de la evolución del Covid-19 en la sociedad y de las medidas que adopten las instituciones sanitarias al respecto.

En este sentido, la consejera de Educación de la Junta, Rocío Lucas, señaló que la propuesta de Castilla y León para el Ministerio es que la reanudación de las clases presenciales se haga de manera “progresiva” en las enseñanzas no universitarias, “siempre y cuando sea seguro”, priorizando para ello a los alumnos que acaban una etapa, como son los de cuarto de la ESO, segundo de Bachillerato y últimos cursos de Formación Profesional Media y Superior.

Así, reconoció que el deseo del Ejecutivo autonómico es poder volver a las aulas “no solo desde el punto de vista académico, sino sobre todo por el entorno social y humano que implica el aula, especialmente entre los más pequeños” y señaló que, de no poder hacerse, su Consejería tendrá que trabajar con otras para ver cómo actuar cuando los padres sí que tengan que volver a sus puestos de trabajo.

Por otro lado, y dado que el periodo para presentar las solicitudes de admisión para los centros se vio suspendido por el estado de alarma, la Consejería ofrecerá un nuevo calendario con los nuevos procedimientos a mediados de mayo para que los alumnos dispongan de una plaza escolar, “con suficiente antelación” al inicio del curso 2020-2021.

Rocío Lucas aseguró que, además, se abrirán nuevos plazos de presentación de solicitudes por vías electrónicas o no presenciales para evitar aglomeraciones en los centros y los registros.

Una EBAU con más opciones

Además, y en cuanto a un tema que preocupa y mucho a los alumnos que se enfrentan este año a la antigua selectividad, ahora EBAU, la consejera explicó que esta prueba tendrá para los examinados un “mayor grado de optabilidad” que en años anteriores, para evitar que se vean perjudicados por la ausencia de docencia presencial.

Sin embargo, esta opción no termina de convencer a todos los alumnos y un grupo de estudiantes del IES Campos y Torozos de Medina de Rioseco (Valladolid) considera, en una entrevista con LA RAZÓN, que tener que elegir entre más opciones puede suponer perder tiempo de respuesta y resolución de los exámenes. Además, creen que el hecho de que haya cinco posibles modelos de prueba “crea más confusión que solución” ya que durante todo el curso se ha estado trabajando en base a los modelos que se conocían de años anteriores.

Asimismo, consideran que de volver a clase en junio “debería ser para hacer simulacros de cara a la prueba y no para hacer finales. La evaluación continua debe primar porque los profesores ven quien está haciendo las tareas y tiene interés y que sea el equipo docente el que decida quien pasa o no es lo más justo teniendo en cuenta las circunstancias".

En cuanto al desarrollo del tercer trimestre, aseguran que en su caso están avanzando como lo harían con las clases presenciales mediante las herramientas de Microsoft facilitadas por la Junta y que la resolución de dudas, al ser un grupo pequeño, se realiza a través del correo electrónico sin mayores dificultades, pese a lo cual piden más concreción a la Administración porque se trata de un año crucial “y estamos viviendo un clima de incertidumbre”.

Por otra parten, explican que la aplicación que más utilizan para seguir las clases es Teams, también dentro de las prestaciones de Educacyl, donde trabajan en grupo, los profesores suben los archivos sobre las materias, se mandan las tareas y se reciben las correcciones y notas. “Es como ir al instituto pero por ordenador”, aseveran.

No es el momento de mandar repetir a ningún alumno

De cara a las evaluaciones, desde el Ministerio se ha considerado que la norma general sea la promoción al siguiente curso y que mandar repetir al alumnado será “la excepción”, así como que el temario avanzará para la adquisición de “competencias básicas”.

Sin embargo, no todos están de acuerdo con esta última premisa. Es el caso de Eva, profesora en el colegio Santa Clara de Cuéllar (Segovia), quien asegura a este diario que no le parece “ético avanzar en contenidos didácticos” en este momento ya que “no se puede sustituir a un profesor por un padre” a la hora de explicar las materias, por lo que ella apuesta por dedicar estos días para mandarles tareas más creativas y “fomentar el aprendizaje de otras cosas también necesarias, como el correcto uso de las tecnologías y las emociones”.

“Tres meses en la vida real de un niño no son algo realmente importante a nivel de aprendizaje porque son curiosos por naturaleza y evaluar así es imposible, las pruebas carecen de control y es muy difícil saber si los niños realmente han aprendido algo”, señala.

Se puede hacer perfectamente una media con la primera y la segunda evaluación y, aunque no soy partidaria de un aprobado general, tampoco lo soy de las repeticiones, por lo que el curso que viene se deberían destinar más recursos a la Educación y debería haber una plataforma dónde efectivamente vayamos todos por igual, donde se ayude también a los padres para que sepan instalar ciertos programas y usar los dispositivos de cara a que los niños puedan seguir las clases”, añade.

Además, señala que, aunque los profesores “se las están ingeniando como pueden”, hay pequeños que lo tienen muy difícil para seguir la rutina del colegio. “Algunos tienen a sus papás enfermos, otros trabajan y en nuestro centro unos tres niños por aula no están contestando a las tareas ni correos desde que comenzó todo esto”, subraya, al tiempo que afirma que no ve clara la vuelta a clase “ni ahora ni en julio para las clases de refuerzo porque no vamos a estar preparados para ello, la vacuna aún no estará”.

Finalmente, destaca que “los niños se están portando como campeones un mes en casa sin salir” y apuesta por “contarles de manera sencilla la realidad, lo que está pasando, para que entiendan la situación que están viviendo”.

Las carreras prácticas, con problemas para avanzar

Otra de las dificultades a la que se enfrentan algunos alumnos de Universidad es al cambio de sus carreras, mayoritariamente prácticas, a la teoría online. Es el caso, por ejemplo, de todas aquellas relacionadas con las artes que, lejos de los libros, impulsan el trabajo a través de la música, la danza o la dramaturgia.

En este sentido Álvaro, uno de los alumnos de la Escuela Superior de Arte Dramático de Castilla y León señala a este periódico que el aprendizaje de los futuros actores y directores se está viendo truncado por este confinamiento que no les permite avanzar como lo harían en la modalidad presencial. “En la universidad adquirimos herramientas para nuestro futuro laboral que con las clases online, en muchas carreras, no se pueden conseguir”, añade, y considera que “hay que cambiar el modo en el que se está dando la materia, el proceso de enseñanza, porque en algunos casos nos está sirviendo de poco”.