Pandemia
El toque de queda sigue vigente y decidirá el Supremo
La Junta insiste en que la medida está amparada por los servicios jurídicos y por la “extrema gravedad” de la situación y afea al Gobierno que “obstaculice la protección de la vida”
El toque de queda a las ocho de la tarde acabará en el Tribunal Supremo. Tras el anuncio del Gobierno de España de recurrir esta medida que entró ayer sábado en vigor por atacar las libertades fundamentales de los ciudadanos en el caso de su movilidad, según apuntan desde el Ejecutivo central, la Junta acaba de asegurar que la restricción sigue vigente en tanto no quede sin efecto por los medios establecidos en la Ley, y que, por tanto, deberá ser el Tribunal Supremo, en su caso, quien determine si el presidente de la Junta de Castilla y León, como autoridad delegada, tiene la facultad o no de modular el toque de queda para hacer frente a la pandemia. La Junta insiste en que “tiene como único objetivo proteger la vida y la salud de las personas, y reducir lo más posible el daño a la economía”.
Desde el Gobierno autonómico aseguran que la medida está amparada por sus servicios jurídicos y que en el momento en que se autoriza la prórroga del estado de alarma, se acuerda la modificación, por un lado, de los artículos 9 y 10 del Real Decreto, incluyendo en la regulación de la eficacia de las limitaciones, su posible modulación, flexibilización y suspensión.
También se refieren a la pérdida de la eficacia de lo expuesto en el artículo 5 cuando la autoridad delegada ejerza dichas facultades, al contemplar su disposición transitoria única sobre la “Eficacia de la limitación de la libertad de circulación de las personas en horario nocturno” que la medida prevista en el artículo 5 del Real Decreto 926/2020, de 25 de octubre, “conservará su eficacia, en los términos previstos con anterioridad al comienzo de la prórroga autorizada, en tanto que la autoridad competente delegada que corresponda no determine, de acuerdo con el artículo 10 del Real Decreto 926/2020, de 25 de octubre, su modulación, flexibilización o suspensión”.
En este sentido, la Junta apunta a la “extrema gravedad” de la situación epidemiológica y sanitaria en España, en general, y en Castilla y León, en particular.
De hecho, recuerdan que llevan tres días seguidos batiendo récord de contagios en pandemia con cerca de tres mil positivos y que la incidencia acumulada se ha multiplicado por cinco desde el 1 de enero y el número de ingresados por covid se ha duplicado en los hospitales de la Comunidad.
Fernández Mañueco, además, lamenta que el Gobierno de España trate de obstaculizar con su recurso la acción de la Junta de Castilla y León, que tiene como único objetivo proteger la vida y la salud de las personas y reducir lo más posible el daño a la economía.
Sánchez debe liderar la crisis sanitaria
El presidente de Castilla y León reclama una vez más al Gobierno de España instrumentos jurídicos seguros, si es que discute los existentes, que permitan a las Comunidades “actuar con rapidez para doblegar la curva de contagios y salvar vidas”. Al respecto, Fernández Mañueco asegura, contundente, que es “imprescindible” que el Ejecutivo central ejerza ya su liderazgo y la coordinación con las autonomías.
Y, finalmente, ruega “encarecidamente” a todas las personas de Castilla y León que reduzcan al máximo su movilidad y contactos sociales, con el fin de frenar esta grave tercera ola de la pandemia
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