Sociedad

La etarra “Anboto” deberá abonar a la Junta de Castilla y León 9.225 euros por la atención médica en el atentado contra Luciano Cortizo

Soledad Iparraguirre deberá indemnizar por la asistencia sanitaria y hospitalaria de los cinco heridos causados por la bomba que acabó en León con la vida del comandante del Ejército

La dirigente de ETA Soledad Iparraguirre, alias "Anboto", saluda desde una sala de seguridad en la Audiencia Nacional
La dirigente de ETA Soledad Iparraguirre, alias "Anboto", saluda desde una sala de seguridad en la Audiencia NacionalJuan Carlos HidalgoAgencia EFE

La exjefa de los comandos ‘legales’ de ETA, Soledad Iparraguirre Guenechea “Anboto”, deberá indemnizar a la Junta de Castilla y León por los gastos de asistencia sanitaria ocasionados por el atentado terrorista que ‘Anboto’ ordenó en León contra el comandante del Ejército de Tierra, Luciano Cortizo Alonso, el 22 de diciembre de 1995 a las 13.20 horas.

El atentado de la banda terrorista ETA consistió en la colocación de una bomba en los bajos de un coche que explosionó ante el semáforo situado en la calle Ramón y Cajal, a la altura de la confluencia de las calles Renueva y Abadía. En él, falleció Cortizo Alonso y resultó gravemente herida su hija, que iba de copiloto en el vehículo, además de otras cuatro personas que transitaban por las inmediaciones.

Ahora, la sentencia de 3 de febrero de 2021 del Tribunal Supremo, que ratifica la previa de la Audiencia Nacional de 22 de julio de 2020, condena a la etarra “Anboto” a 122 años de prisión como responsable de un delito consumado de atentado terrorista contra miembro de las Fuerzas Armadas y de otros cuatro delitos frustrados de asesinato terrorista por ordenar la acción y suministrar el material explosivo para confeccionar el artefacto con el que se cometió el atentado.

Con la apertura de la causa en la Audiencia Nacional, los Servicios Jurídicos de la Junta de Castilla y León se personaron en el proceso como acusación particular, adhiriéndose a las peticiones de penas solicitadas por el Ministerio Fiscal, y reclamando el abono como indemnización de los daños y perjuicios causados a la Administración autonómica de los gastos ocasionados a la Sanidad pública por las atenciones médicas y hospitalarias de todos los heridos.

Más que por la importancia de los daños sufridos a los que ha sido condenada la etarra, y que ascienden a 9.225 euros, es importante la personación judicial de la Junta de Castilla y León por el apoyo que ello supone, específicamente, hacia los familiares de las víctimas y, de forma general, hacia el colectivo de las víctimas de atentado terrorista.

En este sentido, la Junta de Castilla y León, a través de la Consejería de la Presidencia como responsable de la coordinación de la atención a las víctimas del terrorismo, trabaja por consolidar la acción pública en pro del bienestar de las víctimas en la Comunidad, a través no solo de acciones compartidas con la Asociación y la Fundación de Víctimas del Terrorismo en Castilla y León, sino de hitos que buscan impregnar a la sociedad en la defensa de los derechos humanos, los derechos y obligaciones contenidos en la Constitución y en el Estatuto de Autonomía, y los valores democráticos como instrumentos para combatir la lacra del terrorismo.

Estas acciones tienen su ejemplo en el programa “Testimonio de las víctimas del terrorismo en las aulas”, cuyo propósito es que los más jóvenes conozcan la historia, evolución y consecuencias del terrorismo a través de la memoria de sus víctimas, o los reconocimientos y distinciones a aquellos que han vivido en primera persona el horror provocado por el terrorismo en la Comunidad.