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Ganadería

Zamora cuida y protege a las razas autóctonas de la provincia

La Diputación incorpora ganado ovino de esta especie a la Finca Experimental de Madridanos y mantiene también la sayaguesa y alistana-sanabresa de vacuno y el asno zamorano-leonés

Ovejas churras
Ovejas churrasICALAgencia ICAL

Zamora cuida y protege a sus razas autóctonas, motor económico y futuro del medio rural de la provincia. La Diputación de Zamora acaba de incorporar, a través del área de Agricultura y Ganadería, un rebaño de ovejas de raza churra, procedente de la localidad de Villar del Buey, al elenco de razas que mantiene en la Finca Experimental y Núcleo de Conservación de Razas Autóctonas de Madridanos.

De esta forma, la raza de ovino churra se añade a las que la Institución provincial mantiene en las instalaciones ganaderas, concretamente, la sayaguesa y la alistana-sanabresa de vacuno y el asno zamorano-leonés.

“El objetivo es seguir trabajando en la conservación de las razas autóctonas de la provincia y contribuir al mantenimiento de un patrimonio genético de incalculable valor, aportado por animales rústicos, bien adaptados al territorio y capaces de aprovechar de forma eficiente los recursos naturales disponibles”, según señalaron fuentes de la Diputación de Zamora.

La raza ovina churra, perteneciente al tronco churro, una oveja rústica de las más primitivas de la Península Ibérica, forma parte del grupo de razas autóctonas más importantes de España y sus censos principales se concentran en Castilla y León.

La oveja churra destaca por la calidad de sus producciones, tanto de leche como de carne, y es una de las razas incluidas en la Denominación de Origen ‘Queso Zamorano’ y en la Indicación Geográfica Protegida ‘Lechazo de Castilla y León’.

Los animales de esta raza se caracterizan por su capa de color blanco con manchas oscuras en la porción terminal de las orejas, alrededor de los ojos, labios y morro y partes distales de las extremidades.

Actualmente, la raza cuenta con dos variedades reconocidas por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, concretamente, la tensina y la lebrijana, aunque los tratados antiguos de zootécnica reconocían una tercera variedad, la sayaguesa, ubicada en la comarca de su mismo nombre y adyacentes.