Educación

Dos nuevos doctores “honoris causa” de prestigio para la Universidad de Salamanca

Se trata de la antropóloga argentina Rita Laura Segato y el neurofisiólogo colombiano Norberto García Cairasco

El neurofisólogo colombiano Norberto García Cairasco
El neurofisólogo colombiano Norberto García CairascoUSAL

La Universidad de Salamanca investirá mañana como doctores ‘honoris causa’ a la antropóloga argentina Rita Laura Segato y al neurofisiólogo colombiano Norberto García Cairasco. El rector, Ricardo Rivero, destacó hoy en rueda de prensa que ambos comparten ubicación científica en la República de Brasil aunque provengan de Argentina y Colombia, respectivamente. La institución académica salmantina profundiza así en su “vocación americana”, en palabras del mandatario académico, quien presentó este lunes el acto de investidura que tendrá lugar mañana martes, 28 de junio, en el Paraninfo de las Escuelas Mayores según los cánones tradicionales del estudio.

“Con este acto, se muestra la vocación de la Universidad de Salamanca tanto por las ciencias biomédicas, y las del cerebro, como las que representa el doctor Norberto García Cairasco, como por las ciencias sociales y las humanidades, así como los valores contemporáneos de defensa de la justicia y la protección de las personas más desfavorecidas, que se demuestran en la obra ejemplar de la doctora Rita Segato”, añadió Rivero, quien finalizó su introducción recordando que “el compromiso con el progreso del ser humano” es otro de los objetivos que ambos comparten.

Respaldo y custodia

La primera en tener la oportunidad de agradecer el reconocimiento fue Rita Segato, quien compareció junto a su compañero de distinción en el Salón de Retratos del Rectorado. “Estoy muy agradecida porque significa para mí un respaldo a todo aquello por lo cual lucho y a mis posiciones, tanto académicas como a nivel de activismo”, explicó la antropóloga.

Afianzando esta idea, Segato consideró esta distinción como “una custodia” de su proyecto vital y “una legitimación” por parte de la Universidad de Salamanca respecto a los temas que defiende, “tanto en el espacio académico como en la calle”, principalmente en dos grandes áreas: el racismo y la violencia contra las mujeres. “Son los dos temas en los que he mantenido mi actuación, tanto teórica, intentando explicar el origen de estas formas de discriminación y presión, como también respondiendo de forma práctica a los problemas de la gente desde la escucha y la observación antropológica”, apostilló la doctora.

La antropóloga argentina Rita Laura Segato
La antropóloga argentina Rita Laura SegatoUSAL

La propuesta institucional de nombramiento como doctora ‘honoris causa’ a Rita Laura Segato fue defendida por la directora de la Unidad de Igualdad de la Usal, Inmaculada Sánchez Barrios, quien reconoció hoy como “un honor” pronunciar mañana su laudatio. “Todos conocen su obra y buena parte de su vida. Como riesgos más sobresalientes, queríamos destacar precisamente su labor en la defensa de las personas más desfavorecidas, tanto por los problemas raciales en la educación y la discriminación en Brasil, como por la desigualdad de género, ya que la lucha contra la violencia es otra de sus señas de identidad”, resumió Sánchez Barrios.

Según la breve biografía que expuso su madrina, licenciada en Ciencias Antropológicas en la Universidad de Buenos Aires, la profesora Segato se especializó en etnomusicología en el Instituto Interamericano de Etnomusicología y Folklore de Caracas. En 1984 obtuvo su doctorado en Antropología Social en la Queen’s University Belfast, donde estudió Antropología de la Música y Antropología Social. “La profesora Segato es especialmente conocida por sus investigaciones en las cuestiones de género en los pueblos originarios y comunidades latinoamericanas. Sus principales estudios rodean el mundo de la violencia de género y las relaciones entre género, racismo y colonialidad. En estos temas es un referente destacado a nivel mundial y, especialmente, en el ámbito latinoamericano”, apuntó Sánchez Barrios.

Educación como prioridad

En su turno de palabra, el neurofisiólogo colombiano Norberto García Cairasco reconoció como “un placer” y “una enorme satisfacción” el reconocimiento que recibirá mañana en la Usal. Su acento, eso sí, revela una trayectoria de cuatro décadas ejerciendo la investigación en Brasil. “Los seres humanos, a veces, negamos nuestra emoción con una extrema racionalidad y ese es un dilema que todo el tiempo tenemos incluso los científicos”, expresó al incoo de su intervención. “Yo propongo una ciencia humana que, precisamente, se ocupa del estudio de nosotros mismos, que estamos en este enrome planeta que nos incluye y del que no somos dueños”, avanzó.

Su principal reflexión versó sobre la importancia de comprender el universo en toda su complejidad, como se hacía en las culturas primigenias. “Últimamente me ocupo mucho de entender las culturas ancestrales que, simplemente, hemos borrado, y ahora creo que tenemos que volver a una concepción más universal. Y eso solo se hace con educación. Al juntar ciencia con educación y artes tendremos un impacto enorme, pero estamos en un momento de crecimiento voraz que no incluye la educación como prioridad”, lamentó.

El Instituto de Neurociencias de Castilla y León aprobó por unanimidad la propuesta de concesión del doctorado García Cairasco, por ser un “referente mundial en la investigación sobre epilepsia y el desarrollo de modelos animales de experimentación en esta patología”, tal y como destacó su madrina, Dolores López García. Licenciado en Biología por la Universidad del Valle, en Colombia, actualmente es catedrático de Fisiología por la Facultad de Medicina de Ribeirao Preto de la Universidad de Sao Paulo. Ha realizado varias estancias posdoctorales, entre ellas en la Universidad de Duke, y tiene más de 170 publicaciones en revistas de reconocido prestigio internacional y cerca de 4.000 citaciones.

López García añadió durante su presentación que uno de sus principales activos fue impulsar la creación de redes de colaboración entre investigadores de diferentes países. “Cuenta con 449 coautores, lo que da idea de su capacidad de colaborar e integrar diversos grupos y líneas de investigación, entre ellas su contribución a tender puentes entre el INCYL y el laboratorio de Neurofisiología de la Facultad de Medicina de Riberiao Preto”, según explicó en su defensa la profesora.