Juzgados

CSIF denuncia que las aplicaciones informáticas de los juzgado fallan continuamente

El sindicato asegura que hasta un 34 por ciento de los trabajadores tienen problemas de estrés por esta situación

Exterior de los juzgados de Valladolid
Exterior de los juzgados de ValladolidLa Razón

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) denuncia los “continuos” fallos de las aplicaciones informáticas, que se vienen produciendo en las últimas semanas en los juzgados de Castilla y León, que está provocando un retraso y ralentización de la tramitación de los procedimientos judiciales.

El sindicato pone como ejemplo la última semana de septiembre -días 26 y 27- que comenzó con el Punto Neutro Judicial caído. En la página web que da acceso a este sistema, se indicaba que se están produciendo problemas técnicos y que, a consecuencia de ello, el sistema es inestable.

El Punto Neutro Judicial es una aplicación que ofrece, a los órganos judiciales, información necesaria para la tramitación judicial, mediante accesos directos a aplicaciones y bases de datos del Consejo General del Poder Judicial, de organismos de la Administración General del Estado y de otras instituciones y entidades (Administraciones Públicas, colegios profesionales, entidades financieras o registro…).

“Es una aplicación fundamental para que los expedientes judiciales lleguen a buen fin, y se eviten así dilaciones y retrasos innecesarios para los ciudadanos”, señala Juanjo Banciella, responsable de Justicia de CSIF en Castilla y León para quien, “lamentablemente, no es una sorpresa”.

“Los funcionarios de Justicia están acostumbrados a aplicaciones caídas, lentas o errores informáticos que les impide desarrollar su trabajo con normalidad”, denuncia.

Además, explica que en septiembre muchos compañeros no han podido acceder a Minerva (el programa de gestión procesal) hasta mediodía. “Algunos podían entrar, otros no…, todo un caos. Es terrible llegar al trabajo y no poder empezar a utilizar tu principal herramienta de trabajo hasta las doce, y que la respuesta sea repetida, en el sentido de que se trata de una incidencia masiva y que están trabajando en ella para solucionarlo”, se queja.

Tampoco se libran de estas circunstancias los Juzgados de Guardia. “Cuando las aplicaciones fallan apunta que hay que olvidarse del cacareado expediente digital y acudir al sistema tradicional, el Word, la impresora y la firma manuscrita…, para al día siguiente escanear lo hecho el día anterior”, señala.

Si bien, para el sindicato lo preocupante es que cuando no es una aplicación la que falla es otra o quitan o no ponen funcionalidades que son importantes.

“Los funcionarios están hartos de abrir incidencias en el Centro de Atención al Usuario del Ministerio de Justicia, porque al final parece que no sirven de nada!, lamenta Banciella, que pide que se tenga más en cuenta la opinión de los que van a trabajar con las aplicaciones. “La justicia tardía no es justicia, y si no hay medios, no es posible responder a las necesidades de la sociedad”, asegura.

Estrés

Los problemas que generan los fallos informáticos, que se repiten en el tiempo, afectan también a la salud de los propios funcionarios, según el sindicato CSIF, desde donde apuntan que existen estudios que muestran cómo, el mal funcionamiento de las aplicaciones informáticas en el trabajo, afecta al estrés de las personas.

“Esta situación provoca frustración en ellos, al querer realizar tu trabajo y atender adecuadamente a los ciudadanos, y no poder hacerlo”, señala Juanjo Banciella, quien advierte de que hasta un 34 por ciento de los trabajadores tienen problemas de estrés asociados a este mal funcionamiento.

Algo que, a su juicio, puede derivar en el síndrome del ‘burnout’ o trabajador quemado si se repite asiduamente esta situación.

Por todo ello, CSIF ha remitido una queja formal al Ministerio de Justicia, poniendo de manifiesto todas estas circunstancias y reclamando que, de manera inmediata, se pongan las soluciones a los continuos fallos informáticos. “Uno de los motivos de la masiva manifestación que celebramos en Madrid, este pasado sábado 24 de septiembre, fue denunciar la acuciante falta de medios en las administraciones y exigir la calidad de los servicios públicos”, finaliza Banciella.