Medio Ambiente

Cómo solucionar el problema del minifundismo forestal en Castilla y León

La Junta lidera dos programas europeos para hacer eficientes 1,7 millones de hectáreas en manos de pequeños propietarios que no se explotan

Suárez-Quiñones momentos antes de presentar ambos proyectos
Suárez-Quiñones momentos antes de presentar ambos proyectosLeticia Pérez/Ical

Dos programas europeos, liderados por Castilla y León, para buscar soluciones al problema del minifundismo forestal, ya que en la Comunidad existen 1,7 millones de hectáreas forestales en manos de pequeños propietarios que no se explotan, y con un riesgo principal, sufrir un incendio por su falta de explotación, tal y como señalaba el consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, durante la presentación de sendas iniciativas que van a contar con un montante de 12 millones de euros, y donde participan también la Universidad de Valladolid (UVa), la Fundación cesefor así como la Federación de Asociaciones Forestales de Castilla y León (Fafcyle).

"Estamos hablando de programas elaborados desde la Comunidad para resolver un problema común de toda Europa", recalcaba el consejero quien informaba que los proyectos seleccionados son Small Good, liderado por la UVA y Fafcyle y que será coordinado por el Instituto Noruego de Bioeconomía, y al que se han incorporado instituciones de numerosos países de Europa.

Con estos proyectos se buscarán fórmulas para paliar el problema del minifundismo forestal y ponerlas a disposición de todos los países de la Unión Europea y una vez que se desarrollen los proyectos y se conozcan sus conclusiones, la Junta podrá modificar la normativa existente, los planes estratégicos y la convocatoria de ayudas, para que estén en línea con los resultados de ambos proyectos de innovación e investigación. "Queremos explotar los 1,7 millones de hectáreas forestales improductivas que hasta ahora existen en la Comunidad", indicaba.

Desde Facyle, su presidente, Jesús Pestaña, además de reconocer que es un “orgulloso” que su programa de innovación haya sido seleccionado por la UE para abordar un “desafío pendiente” de Europa, adelantaba que una buena parte del proyecto será la elaboración de un laboratorio de campo, para lo que se seleccionarán dos comarcas en las provincias de Valladolid y Segovia. A su vez, manifestaba que el proyecto que el proyecto Small Good cuenta con un presupuesto de 7,5 millones, de los que el 14,5 por ciento está asignado a Castilla y León, y tiene como objetivo formar y activar a los pequeños propietarios forestales y desarrollar modelos de negocio y gestión.

Por su parte, el director de Cesefor, Pablo Sabín indicaba que el proyecto Smurf es fruto del trabajo de muchos años y destacó que para la fundación es un motivo de “orgullo” ya que es la primera vez que lidera un proyecto europeo de este tipo. A su vez, explicó que se trabajará en nuevos modelos de gestión forestal, “ya que tenemos claro que no hay posibilidad de conservar si no se aprovechan los recursos. Hay que unir gestión y conservación y tenemos que ser capaces de dar rentabilidad a las pequeñas propiedades”, explicó.

Al mismo tiempo, Sabín explicaba que el programa Smurf buscará también encontrar nuevos nichos de mercado y rentabilidad en la gestión del carbono a nivel europeo con la puesta en marcha una plataforma.

Por último, Felipe Bravo, catedrático de planificación forestal de la UVa, argumentó que lo esencial de ambas iniciativas es que Castilla y León lidera la búsqueda de soluciones para un problema común de toda la UE, ligando tres aspectos claves como la sostenibilidad, la bioeconomía y el cambio climático.