Sociedad

Salamanca ya luce la réplica del crucero de San Cebrián en memoria de la desaparecida iglesia del mismo nombre

Se sitúa en las inmediaciones del último vestigio que queda en pie del antiguo templa, la cripta conocida como la Cueva de Salamanca

El alcalde García Carbayo durante la inauguración de la réplica
El alcalde García Carbayo durante la inauguración de la réplicaSusana Martín/Ical

Salamanca luce desde este martes la réplica del crucero de San Cebrián en la plaza de Carvajal de la ciudad. Se trata del lugar que ocupó la cruz original durante más de dos siglos y para el que fue concebida con el objetivo de recordar a la desaparecida iglesia del mismo nombre, de la que hoy únicamente se conserva su cripta conocida como la Cueva de Salamanca.

“Hoy resarcimos una deuda pendiente que teníamos con el patrimonio de esta ciudad”, señaló el alcalde de Salamanca en declaraciones recogidas por Ical en la plaza de Carvajal durante la presentación de la pieza, acompañado del concejal de Fomento, Fernando Carabias, y por el auto del trabajo, el escultor, Óscar Belinchón.

El regidor consideró que el artista “ha tomado muy bien la medida a la ciudad”, ya que es el autor de siete medallones de la Plaza Mayor. El último, en 2023, el de Alfonso IX de León, pero también realizó los de Miguel de Unamuno (1986), Elio Antonio de Nebrija (1992), Fernando VII (2005), Alfonso XIII (2005), La Primera República (2005) y Juan de Borbón (2005).

Alvariño realizó la réplica en bronce y granito para garantizar su durabilidad en el tiempo. García Carbayo explicó que a finales del siglo XVIII el original del crucero de San Cebrián se retiró de la plaza de Carvajal por las obras del seminario del mismo nombre. La Diócesis de Salamanca, propietaria de la pieza, lo trasladó hasta el cementerio San Carlos Borromeo donde se encuentra desde 1886.

Está previsto, según avanzó el alcalde, que la pieza original se someta a trabajos de conservación esta primavera, que serán costeados por la empresa concesionaria del cementerio, y que ya disponen de la autorización tanto de la Diócesis de Salamanca como de la Comisión Territorial de Patrimonio. “Saben que el estado de deterioro de la pieza original es muy avanzado lo que descartaba la posibilidad de un traslado al lugar para el que se concibió. Por eso apostamos por encargar a Óscar Alvariño una réplica exacta que los salmantinos y visitantes ya pueden admirar en este espacio y que incrementa el atractivo de la plaza de Carvajal”, comentó.

García Carbayo recordó que la plaza de Carvajal es una zona en la que en los últimos años se han realizado actuaciones “muy relevantes” para ampliar la oferta turística de Salamanca ligada al patrimonio y a los restos arqueológicos, como la apertura del Centro de Interpretación de las Murallas salmantinas. Asimismo, en los próximos meses se realizará una actuación en la Cueva de Salamanca para solucionar los “problemas de humedades” que presenta. Para ello hay una partida de 100.366 euros en el presupuesto municipal de este 2025.

Por su parte, el autor de la obra, Óscar Alvariño, aseguró ante los medio que volver a Salamanca es “una satisfacción enorme” y agradeció la confianza y el trabajo del equipo que le ha respaldado “en todo momento”. “Es un proyecto serio, muy concienzudo, con un análisis del original, con todos los pormenores y luego con. la restauración a nivel modelado y escultórico de todos los elementos que faltaban, o que estaban muy erosionados.

Alvariño explicó que tardó unos seis meses en realizar la obra. “Estoy muy contento con el trabajo y sobre todo que va a tener una acogida significativa ya que había ese deseo de tenerlo consolidado y que no se siguiese deteriorando el original de piedra de Villamayor”, concluyó.