Tiermes, un yacimiento que resurge en tierras sorianas

Continúan los trabajos en el yacimiento arqueológico soriano de Tiermes, en el suroeste de la provincia. El último de ellos es la mejora integral de la interpretación de la muralla, que permitirá visualizar el conjunto y el trazado, con el fin de difundir y dar a conocer la configuración constructiva de este monumento y los límites de la ciudad en la época tardoromana. Situada en el cerro conocido como El Castro, en el término de Montejo de Tiermes, en este lugar se vivió una intensa ocupación desde los tiempos prehistóricos, aunque los restos actuales corresponden a la etapa celtibérica y romana.

Declarado Bien de Interés Cultural como Zona Arqueológica en el año 1999, entre los restos recuperados hasta la fecha en las excavaciones arqueológica destacan las estancias y habitáculos excavados en la roca, la necrópolis celtibérica de Carratiermes, las canalizaciones que perforan la base del cerro, el área del foro con sus tabernas y templo, complejos edificios públicos como el denominado Castelum Aquae o las termas, así como las obras de infraestructura urbanística, calles o puertas defensivas, como la muralla tardorroamana que rodea el cerro.

Al lado, la ermita de época románica, con ábside de medio punto y galería porticada, donde destacan su rica y variada decoración de los capiteles y canecillos.

Actuaciones

Desde el año 2007, la Junta puso el programa «Tiermes laboratorio cultural», un proyecto integral encaminado a la consolidación, preservación y difusión de los restos arqueológicos, así como el emprendimiento de programas de investigación relacionados con el paisaje cultural y con el potencial social y artístico de su arqueología.

En el año 2013 se realizaba la recuperación, protección y puesta en valor del conjunto rupestre y de la Casa del Acueducto y después se llevaron a cabo actuaciones de refuerzo de la señalización y de apoyo al recorrido y a la visita pública.

En 2019 se planteó mejorar la conservación y comprensión de la muralla tardía. Las excavaciones han determinado con precisión el trazado, niveles y composición del tramo norte de la muralla, así como identificar los volúmenes de relleno.

Una actuación que está prevista que finalice en este mes de septiembre y que se están centrando en una serie de actuaciones de conservación de los restos visibles de la muralla en su zona norte, y la reconstrucción de los lienzos con aportación de material que permita la conservación de la estructura original.