Festivales para mirar a los ojos al siglo XXII

El relato de la modernidad es tan aburrido en el siglo XXI que hay que destrozarlo como sea. A un niño le encanta que le repitan todas las noches el cuento de la caperucita roja. Dos años después, rezará porque le expliquen otro o simplemente renunciará a la articulación verbal de pensamientos. Simplemente ladrará cuando las cosas no le gusten y pondrá caras cuando sí. Para evitar que la sociedad en pleno empieze a ladrar, es importante abrir las posibilidades de expresión y buscar nuevos vehículos de comunicación artística. Porque nadie dice que «La caperucita roja» esté mal, lo que está mal es quien lo repite una y otra vez. Al final sólo se convierte en un perro que ladra, nada más.

Esta semana se ponen en marcha una serie de festivales que buscan abrir el marco de referencia expresiva y ofrecer nuevos relatos y formas de comunicación, ya sea desde la música, el cine, el arte digital, las artes escénicas, el video arte o la manipulación de objetos. Los jóvenes inquietos están de enhorabuena porque la Barcelona del fuego y las protestas será también una ventana abierta a la innovación y experimentación en busca del siglo XXII.

El primero en abrir fuego es el Mira Festival, que después de nueve ediciones se ha convertido en referencia absoluta dentro de las artes digitales sin buscar otros cuentos. En su último año en la Fabra i Coats, se abre en esta edición a diferentes equipamientos culturales, como el Auditori, el Lliure o IDEAL, y promete emociones fuertes con los conciertos audiovisuales de Floating Points o el regreso de Biosphere. Además, performances del artista británico Colin Self, proyecciones de videoarte en 360 grados, instalaciones inmersivas como las de Audint y el estreno mundial de su «Obsidisorium», o el trabajo visual exclusivo de la artista Evelyn Bencicova con la sesión de Dj Clark.

Paralelamente, en el Arts Santa Mónica, se abre del 6 al 17 de noviembre el If Festival, la bienal de teatro visual y de objetos que este año está dedicado a la figura y el cuerpo. La sala Hiroshima, L’Antic Teatre y el Institu del Teatre acogerán propuestas que van de la más radical modernidad al ritualismo más arcaico, como los Bonecos de Santo Aleixo, declarados Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por parte de la Unesco.

Berlín I love you

Por último, el lunes abre sus puertas la 26 edición de L’Alternativa, el festival de cine alternativo y experimental, con las propuestas más arriesgadas e innovadoras dentro del séptimo arte. En total, 40 filmes, entre largometrajes, cortometrajes, entran en competición en un año que se celebrará la creación del cineasta francés Jean-Gabriel Périot, que realizará dos masterclasses o la cineasta catalana Neus Ballús. El CCCB, la Filmoteca y los cines Zumzeig serán los espacios de proyección de las películas cuyo hecho más destacado es la absoluta libertad creativa de sus autores. «Volvemos a apostar por el cine más innovador, comprometido y libre con la idea de ampliar la mirada», dijo ayer Cristina Riera, una de sus responsables, que aseguró que visitarán el festival 70 directores.

La inauguración correrá a cargo de la Societat Doctor Alonso que realizarán una performance alrededor de la película «Andrei Rublev», de Andrei Tarkovski. «Hace años apostamos por el documental y el tiempo nos ha dado la razón. Ahora lo hacemos por el híbrido con las propuestas escénicas y esperemos tener la misma suerte», sentenció Riera, que también anunció un ciclo dedicado a los 30 años de la caída del muro de Berlín.Y todo esto en una semana que también verá la inauguración del Loop Festival, el gran escaparate europeo de video arte que involucra a toda la ciudad.