Cataluña

Aragonès mantiene un contacto con Puigdemont para desbloquear la investidura

El candidato de ERC habla con el expresidente de la Generalitat para tratar de reconducir las negociaciones y acercar un acuerdo

El candidato de ERC a la presidencia de la Generalitat, Pere Aragonès, atiende a los medios tras reunirse con el equipo que negocia el pacto por la investidura, este sábado en la sede del partido en Barcelona.
El candidato de ERC a la presidencia de la Generalitat, Pere Aragonès, atiende a los medios tras reunirse con el equipo que negocia el pacto por la investidura, este sábado en la sede del partido en Barcelona.Toni AlbirEFE

Las negociaciones entre Esquerra y JxCat empiezan a moverse. En las últimas horas se ha producido un contacto entre Pere Aragonès y Carles Puigdemont para tratar de desbrozar el camino al acuerdo tras varias semanas de bloqueo. Ambos se han erigido en los principales protagonistas del culebrón de la investidura y ambos tienen una mala relación después de la legislatura pasada. «Fue una llamada cordial y aclaradora», ha desvelado Aragonès en una entrevista en «Catalunya Ràdio».

¿Ha supuesto esta conversación un paso adelante en las negociaciones? Hay escepticismo entre los negociadores, que creen que tampoco ha permitido grandes avances y las cosas continúan encalladas. En este sentido, en el punto de mira continúan estando, sobre todo, las diferencias internas que hay en JxCat (sectores que apuestan por entrar en el Govern y sectores que defienden quedarse en la oposición) y que se hicieron aún más visibles con las palabras de ayer de Josep Costa, afín a Puigdemont, que ha abierto la puerta a forzar una repetición electoral si no se despliega la independencia (el «mandato» del referéndum ilegal del 1-O).

Lo cierto es que Puigdemont se mostró muy crítico con Aragonès en la legislatura pasada porque el todavía vicepresidente de la Generalitat (president en funciones) tan solo fue una vez a Waterloo a visitarle. En aquel encuentro celebrado a finales de 2018, el expresident reprochó este trato hacia su figura y ya le advirtió de que esa actitud podría tener consecuencias. Y todo apunta a que esas consecuencias se están también traduciendo en las dificultades que se están hallando para el acuerdo.

En cualquier caso, las negociaciones transcurren en paralelo y, de momento, aunque hay pocos encuentros presenciales, desde ambos partidos defienden que el intercambio de documentos es constante. «Estamos trabajando mucho», ha sostenido Aragonès en la entrevista, sin precisar si realmente hay avances sustanciales. Todavía hay varias carpetas abiertas y no se han adentrado en la distribución de conselleries (habrá tres más que en la anterior legislatura) y los nombres, pero ya empiezan a abordar mecanismos de coordinación y de control para evitar incumplimientos y choques en el gobierno de coalición.

Aragonès ha apremiado a JxCat a fraguar un acuerdo de forma inmediata. «Cada día que pasa, el coste es más alto de no formar Govern. Agotar el plazo es una irresponsabilidad», ha advertido Aragonès. «Cuanto más tardemos, más difícil será elaborar los presupuestos», ha añadido. En estos momentos, están tratando también la estructura y el plan de gobierno –hay intercambio de documentos con la puesta en común de los respectivos programas electorales– y en el aire continúan aspectos relacionados con el «procés».

En este sentido, por un lado está el papel de Puigdemont y la confección de un «Estado mayor» que pilote el «procés» y, por otro lado, está cómo encarar la relación con el Gobierno y el papel a desempeñar en el Congreso de los Diputados. Ambas formaciones tienen de plazo para el acuerdo hasta el 26 de mayo, aunque todo apunta a que podría darse hacia finales de este mes.