Pancatalanismo

El independentismo catalán celebra la marginación del castellano en las Baleares

La “ONG del catalán” Plataforma per la Llengua destaca que no sea lengua vehicular en las escuelas de las islas

Vista general de una sesión plenaria en el Parlament de las Islas Baleares.Isaac Buj / Europa Press
Vista general de una sesión plenaria en el Parlament de las Islas Baleares.Isaac Buj / Europa PressIsaac BujEuropa Press

En una nota de prensa, la organización ultraindependentista Plataforma per la Llengua ha recordado que la semana pasada ya se quejaron por la incorporación del castellano como lengua vehicular.

Tras no hacerlo, la plataforma ha insistido y celebrado en que “gracias a las presiones” de la ONG del catalán y del resto de entidades, el Govern ha rectificado y ha mantenido el catalán como única lengua vehicular en la educación.

El portavoz del Moviment per l’Escola en català y delegado de Plataforma per la Llengua, Ivan Solivellas, ha afirmado que eliminar la referencia explícita a la covehicularidad del castellano es “un cambio importante, pero hay muchos aspectos que no nos convencen de esta ley y consideremos que no se debería aprobar”.

En cualquier caso, la plataforma ha aseverado que seguirá trabajando para que los poderes públicos no menosprecien la lengua propia de Baleares.

La futura ley de educación de Baleares, la primera en 20 años, que se debatió y votó esta semana en el parlamento autonómico balear, no incluirá al castellano como lengua vehicular en la escuela, tal y como estaba previsto en un principio.

Los partidos de gobierno -PSOE, Més per Mallorca y Podem- se han echado atrás y han acordado retirar el punto del artículo que se refería a las lenguas cooficiales -catalán y castellano- como lenguas de enseñanza y aprendizaje del sistema educativo. Por tanto, como lenguas vehiculares. Así, se apostará por que sean los centros los que decidan el modelo que debe hacer posible que los alumnos adquieran las competencias en las dos lenguas oficiales.

En concreto, la ley establece que el catalán debe utilizarse como mínimo en la mitad del horario lectivo, porcentaje que los centros pueden ampliar. En el caso de la lengua castellana, puede utilizarse, pero nunca por encima del 50% del total. Es el decreto de mínimos que aprobó hace dos décadas el PP.

Los partidos han hecho este cambio de última hora después de saber que el PP votará en contra. Justamente, el gobierno había aceptado incluir en la ley la enmienda de los populares que apuntaba que el castellano sería lengua vehicular en las aulas a cambio de que no tuvieran los artículos sobre el modelo lingüístico. Al no ser así, se ha vuelto al texto original.

El papel que daba al castellano el proyecto inicial de la ley de educación había generado el rechazo de los partidos nacionalistas de las Islas, de sindicatos como STEI o ANPE, y de plataformas como el Movimiento por la Escuela en Catalán en las Islas, que consideraban que “agravaba aún más la situación de emergencia lingüística” del catalán. De hecho, pese al cambio, siguen convocadas protestas este martes en Palma en defensa del catalán, al considerar que el decreto de mínimos está obsoleto.

A propósito de las dudas legales que suscita la nueva legislación, el govern balear ha asegurado que “tiene claro” que la Ley de Educación es constitucional por lo que no espera ningún recurso por parte del Tribunal Constitucional (TC). “El Govern tiene claro que la ley es constitucional, son puntos acordados por los partidos del Govern, trabajados de manera conjunta y que ponen en valor tanto la autonomía de los centros en materia lingüística, como quienes no están en el consenso en temas tan importantes para la comunidad”, ha dicho en rueda de prensa el portavoz del Govern, Iago Negueruela, tras la reunión del Consell de Govern.