Polémica
Radiografía de la delincuencia en Cataluña: dos de cada tres detenidos son extranjeros
Marruecos y Argelia encabezan el origen de los detenidos en Cataluña durante 2024
Un informe interno del Departament d’Interior, adelantado por El Caso y enviado discretamente al Parlament, confirma una realidad que desde hace años no aparece en los comunicados públicos de los Mossos d’Esquadra: el 65,5% de las 46.996 detenciones realizadas en Cataluña en 2024 fueron de personas de nacionalidad extranjera. Una cifra que contrasta con el peso demográfico de este colectivo, que representa solo el 18% de la población catalana, según el Idescat.
El documento, elaborado a partir de datos comarcales y mensuales, detalla por primera vez la nacionalidad de los arrestados, una información que Interior había dejado de facilitar a los medios y que los agentes tienen prohibido mencionar de forma expresa en las notas de prensa. La instrucción, según diversas fuentes policiales, proviene de la Direcció General y busca evitar “discursos de odio”, aunque genera incomodidad entre los propios Mossos.
Marruecos y Argelia encabezan la lista
La nacionalidad más frecuente entre los detenidos es la marroquí, con 9.495 arrestados, equivalente al 20% del total. Le sigue Argelia, con 3.805 detenciones (8%). A distancia quedan Rumanía (1.969 arrestados, 4,2%), Colombia (1.735 arrestados, 3,7%), Perú (1.386 arrestados, 3%), completando el top cinco. Después, vienen República Dominicana (882 arrestados, 2%), Albania (688 arrestados, 1,5%), Ecuador (682 arrestados, 1,5%), Francia (663 arrestados, 1,4%) y Honduras (531 arrestados, 1,1%).
En total, los Mossos detuvieron a personas de 136 nacionalidades diferentes, entre ellas 18 andorranos.
Del total de detenidos, 16.214 tenían nacionalidad española, lo que supone un 34,5%, una cifra que incluye también a personas nacidas en el extranjero que han obtenido el DNI.
Barcelona, el epicentro de la desproporción
El peso de los detenidos extranjeros se acentúa especialmente en el área metropolitana de Barcelona. Allí, solo un 24% de los arrestados son españoles. El 17% son marroquíes y el 13% argelinos. Las nacionalidades europeas del Este aparecen ya en porcentajes mucho más bajos.
El patrón se repite con variaciones en el resto del territorio:
- Camp de Tarragona: los españoles representan el 46%, pero un 23% de los detenidos son marroquíes.
- Lleida: la suma de marroquíes y argelinos supera el 28%.
- Gironès: empate técnico entre españoles y marroquíes, ambos en torno al 32%.
En total, 26 de las 43 comarcas catalanas registraron más detenciones de extranjeros que de nacionales. En las comarcas más despobladas la mayoría sigue siendo autóctona.
Los delitos con más presencia extranjera
El informe filtrado no especifica los delitos asociados a cada nacionalidad. Pero el balance público de criminalidad de Interior sí permite observar tendencias:
- 65,8% de los detenidos por robos violentos son extranjeros.
- 64,5% de los arrestados por tráfico de marihuana no tienen nacionalidad española, muchos de ellos de origen albanés.
- 65,8% de los detenidos por ocupación de viviendas también son extranjeros, en su mayoría mujeres de unos 32 años.
- En delitos contra la libertad sexual, el 51% de los arrestados son hombres extranjeros; el 95% son varones y el 65% conocidos por la víctima.
La multirreincidencia: un fenómeno dominado por hombres jóvenes magrebíes
El documento interno dedica un apartado a los 637 delincuentes con siete o más detenciones acumuladas. De ellos, 599 son hombres (94%) y solo 38 mujeres. Su edad media ronda los 30 años.
En cuanto a procedencia, el 57,5% son marroquíes o argelinos, lo que confirma el peso del Magreb en la multirreincidencia. Entre los delitos que más acumulan destacan:
- Hurtos: 35,5%
- Robos con violencia o intimidación: 24,6%
- Robos con fuerza: 20,7%
- Robos en interior de vehículo: 9,3%
Los Mossos han intensificado su respuesta con operativos específicos. Desde abril de 2025 se han puesto en marcha diez dispositivos Kanpai centrados exclusivamente en multirreincidentes, el último de ellos desarrollado en el barrio de la Mina de Sant Adrià de Besòs.
Una realidad estadística que Interior evita explicar
Pese a la contundencia de los datos, el Departament d’Interior mantiene la consigna de no comunicar la nacionalidad de los arrestados de forma pública. Esta política contrasta con la de la Ertzaintza, que sí incluye este tipo de información en sus balances.
La filtración del informe revela una brecha entre el discurso oficial, que insiste en la cohesión social y en combatir narrativas de odio, y la realidad plasmada en las estadísticas internas de los Mossos d’Esquadra, que muestran un peso notablemente superior de las detenciones entre personas extranjeras respecto a su presencia en la sociedad catalana.