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Más mujeres y latinoamericanos atendidos en Casa Caridad

Cuatro de cada diez alojados son mujeres. Crece el número de extranjeros de Latinoamérica debido a los problemas en sus países de origen y el cierre de fronteras

«Cuando llegan a nuestras instalaciones (las mujeres) son más vulnerables y expuestas. Muchas de ellas antes se encontraban en el grupo de gente que residía en viviendas inseguras o inadecuadas»
«Cuando llegan a nuestras instalaciones (las mujeres) son más vulnerables y expuestas. Muchas de ellas antes se encontraban en el grupo de gente que residía en viviendas inseguras o inadecuadas»larazon

Cuatro de cada diez personas alojadas en los albergues de Casa Caridad son mujeres, una cifra que ha aumentado en los últimos años al pasar del 32 por ciento de los alojados en 2015 al 40 por ciento actual, según datos del departamento de Trabajo Social de la institución dados a conocer este lunes.

Según el mismo informe, el 60 por ciento de los albergados son personas entre 41 y 65 años -frente al 50 por ciento del año pasado-el 27 por ciento son valencianos -un 7,3 por ciento más- y uno de cada tres extranjeros procede de Latinoamérica, una cifra también en aumento por los problemas en sus países de origen y el cierre de fronteras.

El presidente de la Asociación Valenciana de Caridad, Luis Miralles, expresa su preocupación por la población femenina, «más resistente a acabar en la calle» y que «intentan agotar todos los mecanismos y vínculos sociales hasta que pierden su red de apoyo».

«Cuando llegan a nuestras instalaciones son más vulnerables y expuestas», apunta, a la par que recuerda que muchas de ellas «antes se encontraban en el grupo de gente que residía en viviendas inseguras o inadecuadas».

Albergue de la ONG en el barrio de Benicalap
Albergue de la ONG en el barrio de Benicalaplarazon

Además, hay un porcentaje que llega acompañada de sus hijos, y que se encuentran en el módulo de familias en el Multicentro de Benicalap, aunque Casa Caridad trabaja para poner a su disposición recursos como el edificio Fénix Sanchis Bergón, presentado recientemente para crear ocho viviendas sociales destinadas preferentemente a estos perfiles.

En el albergue conviven más de cincuenta nacionalidades y especialmente llamativo es la evolución en los últimos años de usuarios que proceden de Latinoamérica, que ha pasado a ser de uno de cada cuatro el año pasado a uno de cada tres actualmente.

«Estas personas llegan solicitando protección internacional, gran parte de ellos utilizan nuestros servicios hasta que encuentran una red de apoyo que les permita encontrar otra solución habitacional», según la coordinadora de Trabajo Social, Cristina Sánchez.

Especialmente llegan de Colombia, Venezuela, Brasil o Cuba, países con problemas sociales y políticas de externalización y blindaje de fronteras.