Coronavirus

Puig relaja su petición de endurecer el confinamiento y lo deja en manos de Sánchez

El presidente prioriza la protección del personal sanitario y alaba la solidaridad de las empresas valencianas

Ximo Puig se reúne por videoconferencia con el presidente de la región de Emilia Romaña, Stefano Bonaccin
El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, se ha reunido hoy por videoconferencia con el presidente de la región de Emilia Romaña, Stefano BonacciniGVAAgencia EFE

El domingo por la tarde vimos a un Ximo Puig duro, firme, que exigía al Gobierno central un endurecimiento radical de las medidas de confinamiento y reducir la actividad empresarial a la mínima imprescindible para atender las necesidades fundamentales de la ciudadanía. Pero el Ximo Puig que hemos visto hoy ha dado un paso atrás: “Eso está en manos del Gobierno central, y no es momento de generar conflicto, ni con el Gobierno ni con nadie".

“Yo pedí que se aceleraran las medidas para proteger a todos aquellos que deben acudir a sus lugares de trabajo”, señala ahora el presidente, quien insiste en que la decisión de hacer más estricto el confinamiento está en manos del Gobierno central.

El presidente de la Generalitat ha atendido a la prensa de forma virtual, como viene siendo necesario estos días, después de mantener una reunión con los síndicos de los grupos parlamentarios de Les Corts, a los que ha querido manifestar su agradecimiento por su apoyo desde el primer momento. Pero Puig ha mantenido hoy también una fructífera conversación el presidente de la región Emília-Romaña, Stefano Bonaccini, la segunda zona más afectada por la propagación del coronavirus en Italia. El país transalpino va una semana por delante del nuestro, por lo que el objetivo de la reunión era saber cómo nos podemos anticipar a la expansión del virus.

De dicha reunión, Puig ha extraído varias conclusiones, dice: la primera, que la actuación de cada uno de los ciudadanos a través del confinamiento es tan importante como el papel que están jugando los sanitarios, sobre todo en la fase en la que se encuentra la Comunitat. “A pesar de que parezca que los datos estén mejorando, no podemos relajarnos”.

La segunda, la protección de este personal debe ser una prioridad. En este sentido, Puig ha anunciado que ya se han repartido más de 6.000 test rápidos entre los centros y que el personal sanitario y sociosanitario debe ser prioritario a la hora de realizarse las pruebas.

Aparte, Puig ha anunciado que en Italia se está experimentando con unos respiradores a los que se pueden conectar varias personas, y en el caso de que finalmente se comercialicen la Comunitat intentará adquirir estas máquinas.

También han hablado de la “post-crisis” sanitaria. Tanto el presidente de la región italiana como Puig han coincidido en que será necesario una Plan Marshall europeo para salir de la crisis que se avecina. “España no podrá sola, Italia tampoco, y seguramente ninguno de los países afectados. Va a hacer falta un europeísmos desde abajo”.