Violencia de género
Las plazas para mujeres maltratadas aumentaron un 15 por ciento durante el estado de alarma
El secretario de Igualdad pide perdón a las mujeres maltratadas durante el confinamiento
La Vicepresidencia y Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas ha incrementado en un 15,2 por ciento el número de plazas residenciales para la atención de mujeres víctimas de violencia de género y sus hijos e hijas durante el estado de alarma decretado con motivo de la pandemia por la COVID-19.
Así lo ha explicado el secretario autonómico de Igualdad y Diversidad, Alberto Ibáñez, durante su comparecencia en la comisión de Políticas de Igualdad de Género y del Colectivo LGTBI de Les Corts, a petición del grupo popular, para informar sobre las medidas puestas en marchas para combatir la violencia de género y machista durante la alerta sanitaria.
Ibáñez, que ha pedido disculpas durante su comparecencia a “todas aquellas mujeres, adolescentes y niñas que a lo largo de esta emergencia sanitaria han visto empeorada su situación” y en especial a la familia de Karina Andrés asesinada en Almassora el pasado 19 de marzo, ha querido destacar también que durante el confinamiento todas las profesionales de la red de atención a mujeres víctimas “han continuado con mayor carga de trabajo y complejidad”.
Entre las medidas puestas en marcha durante estos meses, el secretario autonómico ha resaltado la ampliación con 54 nuevas plazas de los recursos de la red residencial de mujeres para hacer frente al incremento de ingresos ocasionados por la COVID-19, lo que ha permitido la atención de 107 nuevos ingresos, 74 mujeres y 33 niños, niñas y adolescentes, según un comunicado de Generalitat.
Asimismo, ha señalado que en la red de centros mujer 24 horas se mantuvo la atención durante todo el estado de alarma, optando de forma preferente, y siempre que fuera posible, por la atención telemática, y ha añadido que durante este periodo se atendió a 3.511 mujeres, de las que 795 acudían a este recurso por primera vez.
Además, se produjeron 13.752 atenciones telefónicas, ya que en muchos casos el seguimiento "se ha hecho de forma más intensa debido a que la convivencia absoluta con los agresores forzada por el confinamiento ha empeorado las circunstancias del contexto de violencia de género".
De este total de atenciones, el 35 por ciento de las consultas ha sido realizada por personas del entorno de la víctima, lo que demuestra, ha dicho, “un cambio de paradigma” en la sociedad, asumiendo una responsabilidad conjunta en la lucha contra la violencia de género, que también se ha impulsado desde el Consell con campañas como “En cuarentena señala el machismo”, que se puso en marcha durante el confinamiento.
“La autonomía personal, la vida independiente y el acompañamiento de las mujeres víctimas de violencia de género y sus hijos e hijas, en el marco de políticas de desinstitucionalización, es la prioridad en el modelo de atención que emana del Pacte Valencià contra la Violència de Gènere i Masclista”, ha recodado.
Ha desglosado las políticas públicas que se han impulsado durante la pandemia desde la Vicepresidencia y Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas y que han estado ligadas "preferentemente a la lucha contra la feminización de la pobreza".
Ibáñez ha destacado los siete millones de euros extraordinarios que se destinaron a los ayuntamientos para las ayudas de emergencia, los 450.000 euros para paliar las consecuencias socioeconómicas de la COVID-19 en la población gitana o la decisión de reforzar la gestión de fondos de emergencia para mujeres víctimas con una ejecución de marzo a junio de 233.372 euros.
Los 7,5 millones de euros para ayudas en materia de vivienda o los 3 millones de euros para subvenciones extraordinarias a la reducción de la jornada laboral, son otras de las medidas destacadas por Ibáñez, quien también ha apuntado el esfuerzo que se ha hecho en la tramitación de la renta valenciana de inclusión, de la que un 67 por ciento de los titulares es mujer.
El secretario autonómico ha hecho un llamamiento a "mantener la unanimidad democrática ante la violencia de género", ya que una ruptura "permite a los agresores machistas aislar con mayor facilidad a las mujeres victimas y a sus hijos e hijas, y elimina puentes seguros para que las mujeres puedan salir del contexto de violencia".
Ibáñez ha informado de que la Conselleria ha repartido de forma directa entre los recursos residenciales de mujeres víctimas de violencia de género y machista, 1.409 botellas de 500 mililitros de hidrogel, 21.080 mascarillas y 224 mascarillas infantiles, 3.500 guantes y 565 protectores faciales.
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