Feijóo, el autonomista, conquista a los empresarios valencianos

Impulso del Corredor Mediterráneo, reforma del sistema de financiación autonómica, adelanto de los fondos europeos a las empresas, eliminación de la centralidad madrileña, rechazo de los nuevos impuestos... El presidente nacional del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha llegado al corazón de los empresarios valencianos al respaldar, una por una, las principales demandas de las compañías de la Comunidad Valenciana durante los últimos años. El líder del PP ha asistido al pleno de la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE), en el que están presentes empresarios como el presidente de Mercadona, Juan Roig, donde, en un templado discurso de más de media hora, se ha referido, no solamente a todas las peticiones de los empresarios de la región, sino al plan económico previsto por el PP para después de las próximas elecciones.

Con respecto a la infraestructura del Corredor Mediterráneo, demandada de manera incansable desde AVE durante los últimos años, Feijóo, que se ha definido como un política “autonomista”, ha asegurado que los empresarios de la Comunidad Valenciana tienen razón “en el fondo y en la forma”. Además, ha agradecido que desde AVE se haya llevado a cabo esta reivindicación “sin hostilidad hacia nadie y haciendo un buen diagnóstico”. “En ocasiones este tipo de debate tiene un componente pasional, y la pasión es buena siempre que no nuble los planteamientos rigurosos”, ha señalado. Ha asegurado que una infraestructura como el Corredor Mediterráneo “no supone una pérdida correlativa de otros territorios de España, porque el impacto positivo en el Mediterráneo acaba generando riqueza en toda la nación”.

El segundo de los grandes asuntos reivindicados desde la región, la reforma de la financiación autonómica, ha centrado buena parte del discurso del líder popular. En este sentido, ha recordado que el actual modelo de financiación fue aprobado en el año 2009, cuando él ocupada la presidencia de Galicia, por el entonces presidente del Gobierno, el socialista José Luis Rodríguez Zapatero, y por el tripartito de Cataluña. Se da la circunstancia, de que en la actualidad vuelve a haber un presidente del Gobierno socialista, apoyado por los “independentistas” catalanes, que no van a aceptar, ha dicho, un modelo que les perjudique. “Cualquier modelo de financiación que vaya en contra del independentismo catalán no se aprobará, y esta es la situación real que hay detrás de todo este modelo sin resolver”.

En cuanto a su posición sobre el asunto, ha señalado que “el indicador fundamental es la población. Yo creo en el coste efectivo de los servicios y no en las componendas políticas del gobierno de turno que necesita que sus socios parlamentarios den el visto bueno a una cuestión que es de todos”. Se ha mostrado convencido de que “es posible un modelo más justo y transparente” y ha recordado que “con el modelo actual, de acuerdo al volumen de recursos por población ajustada, la comunidad autónoma que menos recibe es la valenciana, luego Murcia y luego Andalucía, es es un hecho objetivo que no debemos ocultar”.

Visión autonomista de España

“Tengo una visión autonomista de España”, ha confesado Feijóo, quien huye de los tiempos en los que “había que pasar por un solo sitio para lllegar a todos los sitios”. “La España de las autonomías ya no se concibe como centro y periferia, las autonomías son Estado y, por lo tanto, los presidentes autonómicos son representantes del Estado, por lo que las infraestructuras autonómicas tienen que tener otra concecpción”, una declaraciones que suenan como música celestial para los empresarios de la Comunidad Valenciana.

“Nuestro compromiso exige que las infraestructuras no sean radiales. Estamos superando la trasnochada visión radial y el Corredor Mediterráneo entra claramente en ese horizonte europeo”.

Ya en clave nacional, el presidente del PP ha señalado que “la política ha de perseguir la estabilidad, disminuir las incertidumbres”. Ha asegurado que en el PP “aspiramos, no a hacer oposición, sino a acreditar que somos la única alternativa al gobierno socialista y de Podemos”.

Ha asegurado que España está en una situación económica muy preocupante, con la mayor deuda de toda la UE, el doble de paro de la media europea, siendo el único país que no ha conseguido recuperar el PIB prepandemia, y el que cuenta con una mayor inflación. Además, ha señalado que España es el más endeudado “porque hemos decidido gastarnos 300.000 millones de euros en 4 años, lo que supone incrementar la deuda pública un 20 por ciento sobre el PIB, el doble que la media europea.

Por último, y para acabar de endulzar los oídos empresariales, se ha mostrado en contra del anuncio de Sánchez de crear nuevos impuestos a las empresas, y ha asegurado que “otra política económica es posible, una política de contención en el gasto corriente, gasto burocrático y gasto político” y ha señalado que es “una falta de sensibilidad tener el gobierno más caro de la historia, con 22 ministerios y 803 asesores”.

Ha concluido que “el Gobierno no tiene plan económico porque el Gobierno tiene una crisis interna, que de vez en cuando tiene con sus socios y ahora dentro del PSOE”. “Cuando un Gobierno está en crisis es imposible que gestione la crisis de su país. La recuperación de un país requiere tener primero un Gobierno que no nos mienta”.