Tirón de orejas a la lucha contra el cambio climático en la Comunidad Valenciana

El cambio climático es ya mucho más que un título o nomenclatura. Los fenómenos extremos e incontrolables de la naturaleza son una realidad incontestable a la que nos enfrentamos cada año con mayor virulencia. Buena muestra de ello son los dos incendios que han arrasado el corazón del interior de la Comunidad Valencianaa lo largo de esta semana, con imágenes que permanecerán durante mucho tiempo en nuestras retinas.

La pregunta que muchos se formulan es: ¿qué se está haciendo desde las Administraciones públicas para hacer frente a este drama e intentar frenarlo?

En la Comunidad Valenciana existe desde el año 2007 la llamada Estrategia contra el Cambio Climático, un documento que se ha ido actualizando y que ha sido analizado de manera exhaustiva por la Sindicatura de Cuentas este mismo año, elaborando un informe del que la Estrategia no sale muy bien parada.

La Sindicatura considera que «la inexistencia de informes de seguimiento en el ámbito autonómico, los resultados de los indicadores globales en 2019 y la tendencia de algunas magnitudes como el consumo de energía primaria y la participación de energías renovables sobre el consumo final bruto de energía, parecen anticipar que la Comunidad Valenciana podría no conseguir los ambiciosos objetivos europeos y nacionales al final del periodo planificado (2030)».

Además, el ente estatutaria afea a la Conselleria de Transición Ecológica que la Estrategia «no incluye los hitos y objetivos concretos que se esperan conseguir con cada una de las medidas ni la estimación del coste económico de implementar cada una de ellas». Por ello, dice, no se puede «obtener el grado de ejecución real de la Estrategia, así como si las medidas previstas se han implementado completamente».

Otro de los aspectos que se señalan en el informe de la Sindicatura es que la Comunidad Valenciana no ha progresado de manera significativa en la implementación de fuentes energéticas renovables dentro de su territorio y se observan diferencias notables con respecto al resto de España y de países de la UE.

La Estrategia elaborada por la Conselleria, dice la Sindicatura, se basa en incrementos extraordinarios de la potencia instalada en instalaciones de producción de energía eléctrica a partir de fuentes renovables (básicamente solar fotovoltáica y eólica), «pero no existe un plan detallado para dotarse de las infraestructuras necesarias».

El documento continúa señalando que la Estrategia fundamenta la consecución de los objetivos en la teoría del desarrollo sostenible y no prevé ningún escenario alternativo que tenga en cuenta los límites del crecimiento, de manera que ignora medidas específicas que encaminen a la sociedad y a la economía hacia un posible déficit de energía disponible en el futuro». Además, el Síndic apremia al Consell a aprobar urgentemente la Ley de Cambio Climático y Transición Ecológica de la Comunidad Valenciana.