Sociedad

Santiago Grisolía protagoniza los Premios Jaime I en la primera edición tras su fallecimiento

Valencia acoge la emotiva entrega de la 34 edición de estos galardones

El Rey Felipe VI durante la ceremonia de entrega de la 34ª edición de los ‘Premios Rei Jaume I’, en La Lonja de Valencia
El Rey Felipe VI durante la ceremonia de entrega de la 34ª edición de los ‘Premios Rei Jaume I’, en La Lonja de ValenciaRober SolsonaEuropa Press

El científico valenciano Santiago Grisolía ha protagonizado la 34 edición de los Premios Jaime I en Valencia, la primera celebrada desde su muerte el pasado 4 de agosto a la edad de 99 años. El rey Felipe VI ha iniciado su intervención con un emotivo homenaje, en valenciano, al científico, en el que ha asegurado que hay personas cuyo legado es “imperecedero”, y Grisolía fue una de ellas. Una parte de ese legado son estos galardones Jaime I, que hoy se han vuelto a celebrar en su querida tierra natal, “cuna de de genios, innovadores y emprendedores”.

Los premiados en esta edición han sido: Premio Rei Jaume I Investigación Básica 2022, Jesús María Sanz Serna; Premio Rei Jaume I Economía 2022, Marta Reynal-Querol; Premio Rei Jaume I Investigación Médica 2022, Antonio M. de Lacy Fortuny; Premio Rei Jaume I Protección Medio Ambiente 2022, Emilio Chuvieco Salinero; Premio Rei Jaume I Nuevas Tecnologías 2022, Montserrat Calleja Gómez; y Premio Rei Jaume I al Emprendedor 2022, Ángela Pérez Pérez.

El rey se ha referido a Grisolía como “un valenciano universal que dedicó su vida, su pasión y su talento a mejorar la sociedad a través de la Ciencia; a un visionario que se anticipó al futuro con avances tan determinantes como el ‘Proyecto Genoma Humano’”.

El rey, emocionado, ha rememorado que su relación con Santiago Grisolía se remonta a más de tres décadas, cuando en octubre de 1990, con 22 años, le entregó el Premio (entonces) Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica, cuyo jurado presidió el Nobel español Don Severo Ochoa. Unas semanas antes presidió por primera vez en Valencia la ceremonia de los Premios Rei Jaume I.

“Desde aquella −para mi inolvidable− edición hasta el año pasado, he tenido la fortuna de venir y de compartir con él, con las Fundaciones (FPJI y FVEA) y con los valencianos, varias ceremonias de entrega de estos importantísimos premios para España a grandes figuras de nuestra ciencia e investigación y de nuestro talento emprendedor. Vine en 10 ocasiones, algunas solo y otras con la Reina (ella también lo hizo sola en más de una)”.

El rey ha recordado que acudir a esta ceremonia junto al científico “era algo muy especial, emocionante; tanto por la pasión con la que lo vivía −la misma que dedicó en su vida a la propia investigación−, como por su esfuerzo permanente en divulgar cada avance o descubrimiento que se produjera”.

“Sobre este escenario, enfrente, me recibía siempre la mirada serena, curiosa y generosa del Profesor Grisolía. Porque así es como le llamábamos: profesor. Maestro incansable no solo en generar conocimiento, sino también en acercarlo a la sociedad para hacerla avanzar; para también emprender y darle más valor económico al progreso científico”.

“Si no pedaleas, te caes”

La energía y actividad de Santiago Grisolía hasta sus 99 años de vida fue asombrosa. Cuando le preguntaban sobre el secreto de su vitalidad, contestaba: “Si no pedaleas, te caes”. El profesor nunca dejó de pedalear. Y ese tesón es precisamente una de las virtudes que caracteriza a las personas de Ciencia. Porque los investigadores nunca dejan de pedalear; participan en una carrera de fondo, una carrera en equipo y de relevos, donde cada cual comienza donde lo dejó el anterior.

Durante sus 34 ediciones, estos galardones han reconocido a cerca de un centenar de investigadores, innovadores y emprendedores comprometidos con su entorno y su tiempo. El rey ha dado la enhorabuena a los seis premiados y ha asegurado que “todos merecen el aplauso y el apoyo de nuestro país, que los reconoce hoy, 25 de noviembre, en un día señalado para la Historia de la Ciencia y, por tanto, para la Humanidad”.

Felipe VI ha indicado que hace algo más de un siglo, exactamente un 25 de noviembre, un genio innovador revolucionaba la compresión del universo, del tiempo y del espacio, con la presentación de su obra maestra, la Teoría de la Relatividad, en la que trabajó más de una década. Sin este descubrimiento del físico alemán Albert Einstein, no se habrían podido desarrollar cientos de tecnologías que usamos actualmente, como el GPS, los rayos láser o los paneles solares.

En este “Año de Investigación Santiago Ramón y Cajal 2022″, ha señalado el monarca, “no solo celebramos y reivindicamos la obra y figura de nuestro Premio Nobel; también la relevancia de la Ciencia para dar respuesta a los grandes retos globales contemporáneos”.

Hace un siglo, Cajal ya apostaba por cultivar el talento como clave para la modernización del país. Señalaba que, para su incorporación a los “pueblos civilizados”, urgía “cultivar intensamente los yermos de nuestra tierra y de nuestro cerebro, salvando para la prosperidad y enaltecimiento patrios todos los ríos que se pierden en el mar y todos los talentos que se pierden en la ignorancia.”

En el contexto de esta efeméride, hoy sigue siendo prioritario atraer y retener talento científico e innovador, pues será esencial para que nuestro país sea más competitivo internacionalmente y con mayor autonomía estratégica.

Y con el recuerdo entrañable del profesor Grisolía y de su “inolvidable mirada serena, curiosa y generosa”, el monarca ha termino sus palabras, reiterando la enhorabuena a todos los premiados y agradeciendo el esfuerzo de todas aquellas personas, instituciones y empresas que, “siguiendo la estela de nuestro admirado profesor, continuáis plenamente comprometidas con estos premios y con la ciencia y la innovación, aquí en Valencia y en toda España”.