Política

El PP promete que los valencianos que ganen menos de 35.000 serán los que menos impuestos paguen de España

Garantiza deducciones fiscales por los gastos provocados por la salud mental

VALENCIA, 04/04/2023.- El presidente del Partido Popular de la Comunitat Valenciana y candidato a la Presidencia de la Generalitat, Carlos Mazón, comparece en una rueda de prensa con motivo de la convocatoria de las elecciones autonómicas y municipales del 28 de mayo.EFE/ Ana Escobar
Candidato del PP, Carlos MazónAna EscobarAgencia EFE

Los gastos derivados de los problemas de salud mental o enfermedades raras podrán deducirse en la declaración de la renta en la Comunidad Valenciana. Esta ha sido una de las novedades anunciadas esta mañana por el presidente del PP de la Comunidad Valenciana, Carlos Mazón, durante la presentación de la actualización de la reforma fiscal planteada por su partido en 2021.

La propuesta incluye diez nuevas deducciones fiscales y una reforma del IRPF que situará a todos los valencianos que cobren menos de 35.000 euros como los que menos impuestos paguen en España al reducir el tipo impositivo del 9 al 8,75 por ciento. La reforma, ha explicado Mazón, supondrá un ahorro de 1.750 millones de euros y beneficiará a todos los contribuyentes, aunque especialmente a las rentas bajas y medias.

Mazón, que ha explicado que, si su partido gana las elecciones autonómicas del 28 de mayo, su reforma fiscal entrará en vigor con fecha del 1 de enero de 2023, ha destacado que es “una necesidad” en un momento en que los salarios medios en la Comunitat son "un 9 % inferiores a la media de España, y la renta per cápita es un 12,6 % inferior”.

Con todo el plan, ha detallado, los contribuyentes valencianos se ahorrarían 1.750 millones de euros, todavía más que con la anterior propuesta de reforma del PP, que situaba el ahorro en 1.530 millones, y conseguirá que el 80 % de los contribuyentes sean "los que menos impuestos paguen de toda España”.

La reducción en el tipo impositivo del IRPF que propone el PP incluye la rebaja para los tramos más bajos de renta -que perciban menos de 35.000 euros al año – del 9 % actual al 8,75 %, con lo que, en combinación con el mínimo exento de la Comunitat Valenciana, haría que este tramo de renta fuera el que menos pagara de toda España.

En las franjas altas de renta, el PP plantea “evitar el carácter confiscatorio” de la tributación, con un tipo máximo del 24,5 %, igual al estatal, para que “ningún ciudadano de España, gane lo que gane, pague más del 50 % de lo que gana, porque eso no sería un impuesto sino confiscar”.

En cuanto al resto de impuestos, la propuesta de Mazón prevé “la práctica eliminación del impuesto de sucesiones, el impuesto a la muerte”, la equiparación de sucesiones con donaciones, para “casi eliminar los dos”, y la conversión en progresivo del impuesto de transmisiones patrimoniales.

Las diez nuevas deducciones fiscales están divididas en dos bloques: el social y el económico. En el primero se incluyen las deducciones para los mayores de 65 años que tengan uno o más descendientes a su cargo, con un máximo de deducción de hasta 600 euros, así como los gastos producidos por cualquier patología asimilada a la salud mental y a las enfermedades raras. En estos casos, el límite de renta es de 32.000 euros para la declaración individual y 48.000 para la conjunta.

La propuesta del PP incluye también deducciones por los gastos en salud bucodental y visual y para familias con un componente que sufra Alzheimer.

Para “favorecer la actividad económica”, suman a la cuota cero para autónomos, deducciones de 250 euros para autónomos para nuevos autónomos menores de 35 años o los que se vuelvan a dar de alta después de dos años, así como para inversiones que hagan autónomos menores de 35 años, mayores de 50 o con discapacidad, mientras que se rebajaría 150 euros a los autónomos que contraten a un primer empleado menor de 35 años o mayor de 50.

“Bajaremos la presión fiscal que la Generalitat ejerce sobre los ciudadanos en un 13,21 %”, ha asegurado Carlos Mazón, que ha detallado que los incentivos darían lugar a un crecimiento del 1,5 % del PIB de la Comunitat, y a una subida del consumo de los hogares de un 1,98 %, además de un descenso del paro de dos puntos.

Asimismo, ha afirmado que 1,9 millones de valencianos se verían beneficiados por las diferentes deducciones.