cultura
Asturias ama la poesía
En el día de la poesía celebramos su lectura, escritura, publicación y enseñanza: en la era digital, la creación encuentra una audiencia global
Un día como el de hoy del mes de marzo de cada año, amantes de la poesía de todo el mundo se reúnen y festejan para celebrar el Día Mundial de la Poesía convocados por la Unesco. Aquellos que lo celebramos tenemos como objetivo reconocer la importancia de la poesía como una forma de expresión única que capta la esencia de las emociones humanas y las experiencias de la vida. La poesía, a lo largo de la historia, ha sido una herramienta poderosa para comunicar ideas, explorar sentimientos profundos y crear conexiones entre personas de diversas culturas y contextos. Ese es el empeño de quien preside y ejecuta una iniciativa nacida en Asturias de su mano y que, como todas sus obras, es obra de éxito. Hablo de nuestro asturiano inefable e insigne y codecano de la Prensa asturiana Graciano García y la obra que preside, «Asturias, capital mundial de la poesía». Inasequible al desaliento, hace por estas fechas y todo el año que la bandera de la poesía ondee en lo más alto en lo referido a la cultura de rango internacional. Quiero destacar en este punto y agradecer a LA RAZÓN la oportunidad que cada año nos dispensa desde sus páginas, procurándonos la visibilidad pretendida de esta iniciativa y anunciarla al mundo entero.
Promover la lectura, la escritura y la publicación y enseñanza de la poesía en todo el mundo son misiones que desde «Asturias, capital mundial de la poesía» concuerdan de manera cierta con las pretensiones de la Unesco cuando considera la poesía como una manifestación artística que promueve el diálogo entre culturas y el entendimiento entre las personas. Además de tener la capacidad de revelar la diversidad lingüística y ofrecer una plataforma para que todas las lenguas tengan la oportunidad de expresarse en las mismas condiciones.
Uno de los propósitos clave de esta iniciativa que nace en Asturias y de celebrar este Día Mundial de la Poesía es alentar a todas las personas en el mundo entero a explorar la propia creatividad personal y expresarse así a través de la poesía, ya sea escribiendo poemas originales, recitando obras de otros autores o participando en talleres de poesía. En Asturias, este día, se ofrecen numerosas oportunidades para que la gente se involucre activamente con esta forma de arte. Las escuelas, bibliotecas y centros culturales en todo el mundo organizan eventos especiales, lecturas y concursos para celebrar la poesía y destacar su relevancia en la sociedad actual. Empresas de rango autonómico, nacional e internacional, han mostrado y muestran su apoyo incondicional a tan singular iniciativa. Solamente unos ejemplos, porque sería abrumadora la lista. El Corte Inglés, Renfe, Aena, Mantequerías Arias, ayuntamientos asturianos, Arcelor, EDP, Iberia, por supuesto, este propio diario, LA RAZÓN, y tantas otras que por razón de espacio no podemos mencionar y no por ello menos importantes como las mencionadas. En el día también nos acordamos de los enfermos ingresados y de los hospitales de toda Asturias que nos permiten incorporar en las bandejas de los almuerzos un díptico con un poema para deleite y disfrute de los enfermos, acción ésta, de alguna manera, casi institutonacionalizada. Por supuesto, también en esta era digital que vivimos la poesía ha encontrado nuevas formas de llegar a una audiencia global. Plataformas en línea, blogs, redes sociales y podcasts han permitido a los poetas y a quienes escriben compartir su trabajo con un auditorio más amplio y diverso. El Día Mundial de la Poesía no es solo una celebración, sino también un llamado a la acción. Es una oportunidad para reconocer el papel vital que la poesía juega en nuestras vidas y para fomentar su apreciación y promoción.
Poder transformador
Las palabras tienen el poder de transformar, de sanar y de unir a las personas. Por lo tanto, en este día, es esencial apoyar a los poetas, tanto a los consagrados como a los emergentes, y reconocer su contribución a la cultura y a la sociedad. En conclusión, este Día Mundial de la Poesía es una celebración y un canto a la belleza y al poder de la palabra escrita. Es un recordatorio y pensar que, a través de la poesía, podemos encontrar consuelo en tiempos de dolor, inspiración en tiempos de incertidumbre y conexión en tiempos de aislamiento. Así que, ya sea leyendo un poema clásico, escribiendo cada cual sus propios versos o compartiendo pensamientos en redes sociales, celebramos esta fecha de manera significativa y dejando que la poesía toque nuestro corazón. Gracias a todos, y especialmente a mi querido Graciano García, que vuelve a poner a Asturias en el mundo internacional de la cultura con esta magna iniciativa.
Espero poder seguir saludándoles y animándoles a participar como cada cual estime por estas fechas el próximo año, será señal inequívoca de haber gozado al menos de una decente salud.