El cineasta iraní Jafar Panahi, condenado a seis años de cárcel por conspirar contra el gobierno

El pasado 11 de julio, saltaba la noticia de que el director de cine Jafar Panahi había sido arrestado en Irán tras una serie de detenciones por protestas ciudadanas. Unas manifestaciones que ocurrieron hace una década, pero por las cuales ahora ha sido condenado: la justicia iraní ha anunciado que Panahi irá seis años a prisión, por una sentencia de 2010, cuando se le condenó por unas protestas antigubernamentales ocurridas en 2009. Un portavoz de la justicia iraní, Masud Setayeshí, ha explicado que los seis años de prisión de Panahi “son vinculantes, cinco años por reunión y colusión contra la seguridad nacional y un año por propaganda contra el sistema” de la República Islámica de Irán. U

Si bien el cineasta había rodado varias cintas en el pasado, fue desde aquella sentencia hace 12 años desde que se le prohibió a Panahi realizar películas, escribir guiones o viajar al extranjero, explicó su abogada de entonces. Unas limitaciones que, no obstante, no evitaron que se alzara con el Oso de Oro en el Festival de Cine de Berlín de 2015. Si bien fue puesto en libertad condicional, con la posibilidad de que fuera revocada en cualquier momento, y bajo una fianza de 200.000 dólares, ahora se ve condenado a pasar un tiempo entre rejas.

Durante las polémicas protestas en las que participó, el cineasta mostraba públicamente su apoyo al opositor Mirhossein Musavi, durante las elecciones que entonces se celebraban de manera bastante disputada y que, finalmente, dieron la victoria a Mahmud Ahmadineyad. Asimismo, el cineasta, y tras 88 días de arresto y tras comenzar una huelga de hambre, a través de una carta, juró “por el cine” que no iba a cesar su huelga hasta que se le concediese la libertad. Su caso movilizó a figuras bastante reconocidas del cine de la talla de Steven Spielberg, lo que no ha podido evitar que ahora Panahi se enfrente a sentencia.

Previamente, otros dos destacados directores, el ganador de la Berlinale Mohammed Rassulof y Mostafa Al-Ahmad, habían sido arrestados. Según las autoridades judiciales iraníes, habrían puesto en peligro el orden público con el uso de la violencia y por trabajar con opositores al régimen. Los organizadores de la Berlinale habían protestado contra el arresto. El trasfondo de las protestas es el derrumbe de una galería comercial en la ciudad de Abadan, en el suroeste de Irán, en mayo, en el que murieron más de 40 personas. Las protestas fueron reprimidas violentamente por la policía y las fuerzas de seguridad. Más de 70 personas de la industria cinematográfica iraní pidieron el fin de la violencia policial utilizando el hashtag “Baja tu arma”. Se dice que los iniciadores fueron Rassulof y Al-Ahmad y Panahi expresó su solidaridad.