El desciframiento de la escritura jeroglífica
El descubrimiento de la Piedra Rosetta es clave en el entendimiento de una gran cantidad de inscripciones y documentos antiguos que de otra manera habrían permanecido incomprensibles
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El próximo mes de septiembre se cumplirán 201 años de uno de los descubrimientos que cambiaría para siempre nuestros acontecimientos sobre la época del antiguo Egipto. Jean-François Champollion, descifró la escritura jeroglífica que estaba presente en las tumbas, monumentos y templos, descifrando así mensajes ocultos y fascinantes de una civilización histórica.
Este descubrimiento se debe gracias a la Piedra Rosetta, un antiguo fragmento de una estela egipcia que fue descubierta en el año 1799 en el delta del Nilo, cerca de la ciudad de Rosetta (Rashid), en Egipto. Es uno de los objetos arqueológicos más famosos e importantes en el estudio de la historia egipcia y la clave para descifrar los jeroglíficos.
La Piedra Rosetta está hecha de granodiorita, un tipo de roca, y contiene inscripciones en tres guiones diferentes: jeroglíficos egipcios, escritura demótica y griego antiguo. Fue creada durante el reinado del faraón Ptolomeo V en el año 196 a.C.
En el momento de su descubrimiento, los jeroglíficos egipcios eran un misterio sin resolver, ya que se habían dejado de utilizar alrededor del siglo IV d.C. La Piedra Rosetta se convirtió en un objeto de gran interés, ya que ofrecía la posibilidad de descifrar el antiguo sistema de escritura egipcio.
A partir del hallazgo de la Piedra Rosetta, fueron miles los eruditos que empezaron a estudiar el monumento para intentar descifrar sus mensajes y secretos. Fue el francés Jean-François Champollion, quien, después de muchos años de estudio y comparación de los textos en los tres guiones, logró desentrañar el significado de los jeroglíficos egipcios en 1822.
El significado de la Piedra Rosetta radica en su importancia histórica y lingüística. La Piedra Rosetta es considerada uno de los descubrimientos arqueológicos más significativos de todos los tiempos debido a su papel en el desciframiento de los jeroglíficos egipcios.
Antes del descubrimiento de la Piedra Rosetta, los jeroglíficos eran un enigma para los estudiosos y no se comprendía su significado. La piedra en sí misma contiene inscripciones en tres guiones diferentes: jeroglíficos egipcios, escritura demótica y griego antiguo. Esto proporcionó una clave invaluable para descifrar los jeroglíficos, ya que el griego antiguo era un idioma conocido y podía ser utilizado como referencia para comprender los otros dos guiones.
El lingüista francés Jean-François Champollion fue el primero en descifrar exitosamente los jeroglíficos egipcios utilizando la Piedra Rosetta como base para sus estudios comparativos. Este logro revolucionó nuestro conocimiento de la antigua civilización egipcia y abrió las puertas a la comprensión de su historia, cultura y creencias.
El joven francés presentó sus resultados de la investigación ante la Academia de inscripciones de París alegando que se trataba de una ''escritura pictórica, simbólica y fonética dentro del mismo texto, la misma frase e incluso dentro de la misma palabra''.
La importancia de la Piedra Rosetta radica en el hecho de que permitió el entendimiento de una gran cantidad de inscripciones y documentos antiguos que de otra manera habrían permanecido incomprensibles. Además, fue un hito clave en el desarrollo de la egiptología como disciplina y proporcionó una valiosa ventana al pasado de la antigua civilización egipcia.