De arriba a abajo: así fue la original forma de construcción de las Torres de Colón

Las icónicas torres Colón ubicadas en la Plaza de Colón en el centro Madrid, también conocidas como ‘El Enchufe’, son reconocibles por su tapa verde de estilo art déco y fachada de cobre y vidrio ahumado. Ahora están en proceso de reconstruirse y se espera que el nuevo diseño se termine en 2022, sin embargo, se debe de decir que su forma de construcción en 1967 fue algo mas interesante y revolucionario.

El edificio que desafía nuestro sentido común se construyo de arriba a abajo, levantando por primero los dos pilares centrales sobre zapatas de hormigón. Luego, se levantó el piso más alto y se colgó con cables de acero. El resto de los pisos siguió de arriba a abajo. Solo los tres pisos inferiores, incluidos los sótanos, se construyeron de abajo hacia arriba.

La Sociedad Estadounidense de Ingenieros Civiles explica en mas detalle cómo funciona: “El piso superior de un edificio se construye a nivel del suelo sobre una gran cantidad de tomas. Luego se eleva una cantidad igual a su altura exacta y se construye otra debajo. Lo que ahora es un bloque de dos pisos se eleva a otro nivel y el tercer piso y las paredes se construyen debajo. Estos tres pisos están levantados y así continúa hasta que el edificio ha alcanzado su altura exacta. Luego se ancla a los cimientos.”

Ahorro de coste y tiempo

El método de arriba hacia abajo se utiliza principalmente para dos tipos de estructuras urbanas: edificios altos con sótanos profundos y estructuras subterráneas como aparcamientos, pasos subterráneos y estaciones de metro. Este tipo de construcción proporciona un ahorro significativo en coste y tiempo, ya que permite que los pisos se construyan en el nivel del sótano y se eleven hasta la parte superior, en lugar de mover trabajadores, material de construcción y equipo de piso a piso.

La técnica no es muy conocida o usada, pero hay otros pocos edificios construidos de esta manera, por ejemplo, el Banco Central de Irlanda en Dublín y el Standard Bank Centre en Johannesburgo, Sudáfrica. Otros tres en Polonia también se construyeron así y la ciudad búlgara de Sofía también tiene un edificio de este tipo, construido en la década de 1970.