Rodrigo Blanco: «Una sociedad que asesina sistemáticamente a sus mujeres se está destruyendo»

La caída de los precios del petróleo, el crítico estado de la economía, la altísima inflación y la escasez de alimentos y medicinas. Por esos motivos –además de las protestas en contra de Nicolás Maduro y los presos políticos– suele aparecer Venezuela en los titulares internacionales. Pero más allá de la crisis económica, la inseguridad y las constantes violaciones de derechos humanos, el país suramericano atraviesa una crisis psicológica. “The Night”, la primera novela de Rodrigo Blanco Calderón, comienza a desentrañar algunos de los síntomas de dicha enfermedad. Sus personajes y narradores –un escritor fracasado, un psiquiatra forense, un hombre obsesionado con los palíndromos– construyen un país enfermo de violencia y escaso de moral.

“Estoy convencido de que todo el mal del mundo empieza en las palabras”, dice Pedro Álamo, personaje de “The Night”. “Yo no estoy tan seguro de que sea así”, responde el autor, “pero la mitad de las cosas más terribles que han pasado y están pasando en el mundo provienen de ciertas palabras y discursos que circulan de manera impune”. Blanco le da una importancia evidente en su libro al lenguaje, a los palíndromos y a los distintos significados que puede tener un mensaje porque, según dice, en Venezuela “hay un conflicto entre las cosas que están pasando en la realidad y los modos en que la sociedad se refiere a ellos y los representa. Tenemos de presidente a un payaso, pero que en realidad es un dictador; tenemos más de 200.000 asesinatos en 15 años y, sin embargo, no podemos hablar de una guerra”.

El escritor Darío Lancini fue la cerilla que encendió ese interés y que dio inicio a la novela. “Lancini fue una persona importantísima en la historia del arte y la literatura venezolana. La noticia de su muerte terminó de activar una serie de cosas que yo venía pensando en escribir y, al día siguiente, empecé la novela”, recuerda Blanco, que tardó casi tres años en terminar “The Night” y dedicó mucho de ese tiempo a investigar sobre Lancini. “Al principio, lo que escribí tenía poco que ver con él, pero cuando empecé a escarbar y ver lo que había sido su vida me di cuenta de que era interesantísima. Investigué y recogí muchos testimonios de personas que lo conocieron y, entonces, dije: No sé cómo, pero parte de la novela será su vida”, asegura. De esa vida poco se sabía, pues Lancini fue muy reservado y sólo publicó un libro, “Oiradarío”, que juega un papel importante en la novela de Blanco. Por eso, el autor decidió completar los episodios desconocidos de su vida con su imaginación: “Creo que el libro contiene la mayor cantidad de páginas que se han podido escribir sobre Darío, pero son páginas escritas sobre grandes lagunas y vacíos que, evidentemente, tuve que llenar con ficción”.

Lo mismo sucede con algunos de los otros episodios que recoge “The Night”, como la muerte de Roxana Vargas. La joven fue asesinada por su psiquiatra, Edmundo Chirinos, un prominente médico venezolano y candidato presidencial. Blanco retoma la historia de Vargas, aunque en la novela la joven lleva otro nombre, y la reconstruye, al igual que hace con el calvario que vivió Linda Loaiza, que fue secuestrada y torturada por el llamado monstruo de los Palos Grandes. El autor quiso juntar ambos sucesos para llamar la atención sobre una patología social. “Cuando veo que empiezan a darse asesinatos de mujeres, me entra una angustia, más que existencial, biológica. Una sociedad que asesina sistemáticamente a sus mujeres se está destruyendo”, explica Blanco. “Culturalmente e históricamente, son los hombres los que matan y mueren. Cuando empieza a pasar eso con las mujeres –casi siempre en contextos domésticos y, además, conectados con figuras reconocidas por la sociedad–, notas que, como dice la frase de Hamlet, hay algo que está podrido”, asevera.

Y en este caso, los síntomas también se encuentran en el lenguaje: “Lo que en Venezuela fue en algún momento el hábito cultural del piropo, de la galantería, se ha convertido en una herramienta no para elogiar la belleza de la mujer, sino para castigarla. Es un cambio patológico”, dice. Blanco insiste en que no se trata de una impresión personal, sino que también una profesora de la Escuela de Letras de la Universidad Central hizo un estudio lingüístico que lo demuestra: “Haciendo el análisis de los piropos que circulan actualmente, ella logra ver cómo se pasa del elogio al insulto. Son marcas que te dicen que hay una especie de desprecio por la mujer que, ojo, no inventó el gobierno actual, pero sí activó una serie de complejos y comportamientos totalmente primitivos”.

Esa vuelta a lo primitivo está bien ejemplificada en la crisis energética que inspiró el nombre del libro. En todo el país se implementó un programa de racionamiento eléctrico, pero en Caracas, donde está ambientada la novela, se decidió más bien quitar la luz de las vías públicas. “La crisis energética es la manifestación exterior de todos los cambios que hemos nombrado. Es como si la oscuridad impuesta por ésta desembocara en una oscuridad moral, personal y de la sociedad”, explica Blanco.

Ficha

Título: The Night

Autor: Rodrigo Blanco Calderón

Páginas: 272

Precio: 18,90 euros

Disponible en ebook