Represión cultural en Moscú: la "absurda" condena de dos dramaturgas

Desde el inicio de la invasión de Ucrania por parte de Rusia, en febrero de 2022, la represión está afectando a todas las voces disidentes, especialmente a los círculos culturales, obligados a obedecer el discurso patriótico y militarista del Kremlin. Las últimas víctimas de la represión son la directora Evguénia Berkovitch , de 39 años, y la dramaturga Svetlana Petriïtchouk, de 44 años, que se encuentran encarceladas desde mayo de 2023, acusadas de "apología del terrorismo" por la representación en 2020 de "Finist, the Clear Falcon". Esta misma semana se conocía su condena a seis años de prisión por el tribunal militar de Moscú.

La obra motivo de polémica cuenta la historia de rusos reclutados en Internet por islamistas en Siria y que se unen a ellos para casarse con ellos. Las condenadas han mantenido siempre su inocencia. Antes de su arresto, Evgenia Berkovitch se pronunció públicamente contra la invasión rusa de Ucrania, por lo que se sospecha que su detención estuvo vinculada con esta declaración. También lo cree así la organización de derechos humanos Human Rights Watch.

La UE se ha pronunciado y ve en la condena por terrorismo de la directora y la dramaturga el "autoritarismo desenfrenado" de Putin tachaándola de "absurda". "La sentencia es absurda. Como si Dostoievski fuese responsable del asesinato de Raskolnikov", ha publicado en un comunicado en el que añade que el fallo es un ejemplo más del creciente control estatal de las instituciones culturales y de los intentos por parte de las autoridades del país de limitar las libertades fundamentales. A su juicio, es una confirmación más de "la caída de Rusia en un autoritarismo desenfrenado bajo el control de Putin".

Francia también ha manifestado su rechazo a la "deriva represiva" de Moscú y recuerda a Rusia sus obligaciones en materia de Derecho internacional y de respeto de los derechos y libertades fundamentales. Insta al gobierno de Putin a "liberar inmediata e incondicionalmente a todos los presos políticos", según un comunicado del Quai d'Orsay (Ministerio de Asuntos Exteriores de Francia).