Balón de Oro

Messi consigue su sexto Balón de Oro

Superó en la votación a Van Dijk y Cristiano Ronaldo, con el que rompe el empate a cinco que tenían. El portugués no acudió a la gala

Pasadas las 19:20 llegó Messi, junto al resto de la delegación del Barcelona, con Griezmann, De Jong y Ter Stegen, al Teatro de Chatelet de París. Iba de la mano con su hijo mayor, Thiago, muy formal; mientras el mediano, Mateo, el travieso de la familia, acompañaba a su madre. Leo fue recibido por Stoichkov, ex azulgrana y ganador del Balón de Oro en 1994, el último año en el que el premio estaba limitado a jugadores europeos. Se abrió al resto del mundo la temporada siguiente, en la que el fenomenal liberiano del Milan George Weah se hizo con el galardón. Lo conquistó una vez el africano, como tantos otros jugadores, lo que ya es un logro importante. Pero Messi lo ha hecho suyo, en propiedad. La alfombra lo recibía por la tarde y dos horas después escuchaba su nombre de boca de Drogba, el maestro de ceremonias. Se lo entregó el último vencedor, Luka Modric. Es la sexta vez que el argentino se lleva lo que para casi todo el mundo es el premio al mejor jugador del mundo. Como en el fútbol los premios individuales no son del todo objetivables, incluso podría decirse que no tienen mucho sentido más allá del espectáculo, siempre hay polémica alrededor del Balón de Oro. Cuando en 2018 Messi no estaba ni en el podio, la polémica era que cómo era posible. Como esta vez lo ha ganado después de la debacle de Liverpool, hay quien piensa que cómo es posible. En la votación quedó, por poco, delante de Van Dijk, el holandés del equipo «red» y una de las claves de la conquista de la Champions 2019 en Madrid. Allí mismo, en el Wanda, el central dijo que quien merecía el Balón de Oro era Messi...

Dejando el «circo» aparte, leo fue el ganador y con ello rompe el empate que tenía con Cristiano Ronaldo. Ambos tenían cinco pelotas relucientes y ahora el «10» suma una más que el «7». No acudió a la gala el portugués, que terminó tercero y sí estuvo presente en otro acto en Italia, en el que le nombraron el mejor jugador de la Serie A del curso 2018/19. Entre los dos se reparten los últimos once, a excepción del de Modric. Los méritos numéricos del argentino son la conquista de su décima Liga y que ha sido el máximo goleador del campeonato local y de la Champions, además del Bota de Oro. Justo diez años y un día después del primero, Messi ha sumado su sexto Balón de Oro, lo que habla de un jugador casi único por los años que se ha mantenido en la élite. Desde esa primera vez, en la que Leo acumuló 38 goles, hasta ahora no hay curso en el que no supere las 40 dianas. Por eso Valdano dijo aquello de que Messi era «Maradona todos los días».

A Leo se le ha visto con el premio y su media melena y cara de niño, con sus trajes llamativos como el smoking negro de topos blancos de 2011, y más sobrio las dos últimas veces. Ayer tenía una corbata gris y camisa blanca. Y se recortó la barba que luce últimamente. Ya con ese «look» consiguió el tanto de la victoria el domingo en el Wanda Metropolitano, para mantener líder de la Liga al Barcelona.

Es el primero con sus hijos ya algo más grandes. Mientras Van Dijk felicitaba a Leo, Thiago y Mateo, los hijos del jugador, también se abrazaban, y era el mayor el que se llevaba la peor parte al recibir un golpe en la oreja del terremoto que tiene por hermano. Su familia también fue protagonista en el vídeo de felicitación. Después le tocó hablar a él y dijo que es «consciente de la edad que tiene y de que el final está cerca»... Ante el cierto asombro matizó: «Me quedan años para la retirada, pero el tiempo ahora parece que vuela».