Selección Española

España-Albania: Una estrella sin campeones

La Roja regresa a Barcelona sin ninguno de los campeones del mundo en la convocatoria por primera vez desde 2010

Los jugadores de la selección española participan en el entrenamiento en el estadio de Cornellá
Los jugadores de la selección española participan en el entrenamiento en el estadio de CornelláEnric FontcubertaAgencia EFE

España lleva una estrella en el escudo que la distingue como campeona del mundo. La estrella que se ganó en Sudáfrica con el gol de Iniesta y que por primera vez se queda sola, huérfana, sin ninguno de los que ayudaron a coserla al lado del corazón de los internacionales españoles.

Busquets ha sido el último representante de los campeones del mundo en la selección. Aunque su ausencia es sólo circunstancial, Luis Enrique asegura que le ha dado descanso para que llegue en mejores condiciones a los partidos importantes, es la primera vez que no hay ningún campeón del mundo entre los convocados.

Jordi Alba es el único de los llamados que ha ganado un título con la selección y el que hereda el brazalete de Busquets, como ya hizo en los dos primeros partidos de la Eurocopa después del positivo por coronavirus del capitán.

El lateral izquierdo llegó a la Roja para ganar la Eurocopa de 2012 y es a él a quien le toca tutelar a los jóvenes que han llegado a la selección en los últimos tiempos. Futbolistas como Pedri o como Gavi, que aún no han cumplido los 20 años y otros que llegan por poco. «Son muy maduros para la edad que tienen. Cuando tenía su edad hubo gente que me ayudó a adaptarme en la selección, en el Valencia o en el Barcelona. Intento ser igual que fueron conmigo en su momento», explica el jugador del Barcelona.

Por el camino se han ido cayendo muchos jugadores de aquellos que Vicente del Bosque dirigió en 2010. La mayoría de ellos, retirados. Otros son veteranos y ya no cuentan para el seleccionador. Algunos, como David Silva y Gerard Piqué, se retiraron voluntariamente de la selección. Albiol ha seguido contando hasta hace no mucho para Luis Enrique, a Sergio Ramos lo apartaron las lesiones de la Eurocopa y apenas ha jugado desde entonces. Sólo quedaba Busquets y le toca descansar.

En su lugar han llegado futbolistas como Gavi, Pedri, Ferran Torres o Eric García. Los cuatro se han reunido ahora en el Barcelona. «Hay muchos jugadores de nivel que han salido en el Barcelona y tenemos la suerte de que son españoles. Para la edad que tienen te sorprenden muchísimo. A su edad yo estaba jugando en el Cornellá y ellos están jugando con la selección y es una maravilla», asegura el capitán ocasional de la selección española.

La juventud de sus futbolistas no hace que España esté falta de liderazgo. «También se hablaba en la Eurocopa de eso y creo que hicimos un grandísimo papel. Hay gente muy joven, pero muy experimentada y capacitada. Va por edades, la gente va dejando la selección y los equipos y va viniendo gente muy joven. El trabajo del seleccionador está siendo espectacular, con gente por la que no se daba un duro y han venido y han dado la cara», explica Jordi Alba.

«Tiene que haber un equilibrio de gente joven y veterana. Esto va por generaciones y gente que ha sido campeona del mundo y campeona de Europa se va retirando y va viniendo gente nueva que lo está haciendo muy bien», añade.

«Claro que ha valido la pena, por lo menos para mí. Hago la lista y no miro la edad que tienen», dice Luis Enrique cuando le preguntan por los jóvenes. «Siempre digo lo mismo, no es un disculpa, que sólo puedo llevar a 23. Hemos conseguido aunar, por lo que veo en el vestuario, un conjunto de gente veterana que son excepcionales y gente joven humilde, con hambre y con ganas de comerse el mundo. Sólo puedo decir maravillas de este grupo. Cada concentración se va mejorando el ambiente», asegura el seleccionador.

Vuelve a Barcelona

Luis Enrique regresa a Barcelona para un partido de la selección, algo que no hacía desde que ganó el oro olímpico en los Juegos Olímpicos del 92. El ambiente es bueno y la Federación está satisfecha con la venta de entradas. «Daba por hecho que se iba a llenar. La última vez que jugué con la selección en Barcelona se llenó con 80.000 espectadores en la final de los Juegos, uno de los mejores partidos de mi vida. Que sea algo normal es lo que tiene que ser», afirma.

Para Alba también es especial el partido. No sólo porque se juegue en Barcelona sino porque fue futbolista del Cornellá. «Esperaba jugar en Barcelona porque no tiene por qué ser lo contrario. Es una ciudad más y me alegra que mi gente pueda disfrutar de la selección», dice. David Raya también jugó en el Cornellá. «Ha estado aquí y para él es una ilusión tremenda estar con su gente. Es su primera convocatoria y está con mucha alegría», reconoce Alba.