Menos de 24 horas le han bastado al juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz para imputar al Fútbol Club Barcelona, como persona jurídica, por un delito fiscal en el fichaje de Neymar tal y como le pidió la Fiscalía, que cree que la entidad ha podido defraudar a Hacienda 9,1 millones de euros en la operación. En una resolución notificada ayer, el magistrado hace suyos los argumentos esgrimidos por el fiscal José Perals y coincide con él en que existen indicios de que el club azulgrana ha podido cometer un delito contra la Hacienda Pública sirviéndose de una «simulación contractual» que supuestamente habría engordado notablemente las retribuciones a percibir por Neymar, «teniendo en tal caso la consideración de rendimientos de trabajo y debiendo tributar por este concepto». Ruz acuerda, por tanto, admitar una por una las diligencias que le solicitó la Fiscalía, al considerarlas «pertinentes, necesarias e idóneas» para avanzar en la investigación hasta el «total esclarecimiento de los hechos».

Así, el juez de la Audiencia Nacional reclama a la Agencia Tributaria las declaraciones voluntarias de impuestos realizadas por el Barcelona en los años 2011, 2012 y 2013 relacionadas con el fichaje del ex jugador del Santos. Del mismo modo, pide a Hacienda que le aclare si Neymar se consideraba, a efectos fiscales, «no residente» en el ejercicio de 2013 (lo que obligaría al Barcelona a practicar las retenciones correspondientes sobre todas las retribuciones efectuadas al delantero, directa o indirectamente). Por último, Ruz pide a la Agencia Tributaria que designe un perito que informe de las consecuencias fiscales de los once contratos firmados por el club y empresas controladas por el padre de Neymar; de las fechas de devengo de los impuestos; de los obligados al pago de los mismos; del cálculo de la cuota resultante y, en su caso, de una propuesta de regularización fiscal.

Asimismo, da diez días de plazo al padre de Neymar para remitirle toda la información sobre las empresas que firmaron los contratos con la entidad blaugrana.

En otra resolución, el juez condiciona la aceptación de la ampliación de la querella interpuesta por Manos Limpias –contra Josep Maria Bartomeu, el vicepresidente primero Javier Faus y el padre de Neymar– a que el sindicato abone una fianza de 45.000 euros frente a los 60.000 que pedía el fiscal.