Selección Española

Goleada por inercia

El dominio absoluto de España sólo se reflejó en el marcador en los últimos minutos, cuando llegaron tres de los cuatro goles. La nueva España de Lopetegui responde.

Vitolo celebra con sus compañeros
Vitolo celebra con sus compañeroslarazon

El dominio absoluto de España sólo se reflejó en el marcador en los últimos minutos, cuando llegaron tres de los cuatro goles. La nueva España de Lopetegui responde.

España domina la pelota cuando se mueve y sufre cuando se queda quieta. La personalidad de la Roja se mantiene con los años, maneja el juego, abruma con la posesión a sus rivales y sólo se atasca ante el gol. Llegó a la hora de juego con un solo tanto a favor y tuvo que apretar al final para que el resultado estuviera más cerca de lo esperado.

La Roja permitió que Macedonia amenazara en las jugadas de estrategia. Velkovski remató de cabeza en un córner y De Gea tuvo que hacerse presente por primera vez. Pandev lo intentó después, pero su remate se marchó al lado del poste de la portería española.

Mientras Macedonia se ilusionaba con la pelota parada, la Selección la arrinconaba en su campo, encerrada en su área a base de toques que llegaban hilados desde la defensa española. Busquets y Koke mandaban en el centro del campo, aunque el centrocampista del Atlético parecía echar de menos los espacios que está acostumbrado a encontrar en los partidos de su equipo. Algo parecido le sucedía a Thiago, un futbolista de una calidad enorme, pero que a veces parece empeñado en dejar su firma en cada pase. Algo similar a lo que le sucedía a Iván de la Peña antes de perderse para el fútbol de altísimo nivel. Siguió siendo deslumbrante, pero lejos de la Selección y de los equipos que ganan títulos.

Con un equipo lleno de jóvenes, con Bartra y Nacho como centrales de urgencia por la ausencia de Ramos y Piqué y sin Iniesta delante, la Roja se encontraba consigo misma de verdad cuando el balón llegaba a los pies de Silva. El canario era el único «centenario» de la Selección en el partido, el único superviviente sobre el césped de la Eurocopa de 2008 que enseñó a España a dominar el mundo y se estrenaba como capitán.

Macedonia se esforzaba en una presión adelantada que apenas le servía para tener a España algo más de tiempo alejada de su portería. Sólo en la segunda mitad le sacaron algo de provecho en un disparo lejano de Berdhi que De Gea detuvo con algún adorno de más. El guardameta español trabajaba más que Dimitrievski, el portero del Nastic, que jugaba enfrente y sólo cayó víctima del fuego amigo, en un remate contra su portería de Velkovski que le pilló con el pie cambiado.

Morata lo intentó de todas las maneras. Quería aprovechar la ausencia de Diego Costa, el preferido de Lopetegui para ser el «9» del equipo, para demostrarle que está en condiciones de ser la referencia ofensiva de la Selección. Pero le faltó tranquilidad para superar a Dimitrievski con la izquierda en la ocasión más clara de la primera mitad. Tuvo más oportunidades, pero le sobraron defensas apurando los límites del reglamento para conseguir algún gol. Al final, se marchó sustituido por Aduriz, que acertó a la primera para marcar el cuarto. El delantero del Athletic saltó al campo con el «9», el número que señalaba a los goleadores cuando el fútbol era sólo fútbol, como si necesitara algún detalle más para reivindicarse ante Lopetegui después de los cinco goles que consiguió con el Athletic la semana pasada en la Liga Europa.

Antes de que Aduriz cerrara la goleada había llegado el gol de Vitolo para dar tranquilidad a España. El extremo del Sevilla se ha hecho fuerte en los costados de la Selección. Marcó de cabeza y se permitió dejar pasar la pelota entre las piernas para que rematara Aduriz con tranquilidad. Más motivos para que el seleccionador continúe confiando en él.

La Roja se encontró con su esencia en el tercer gol, una jugada en la que también intervino Vitolo, igual que Isco, aunque terminaran resolviéndola entre los dos laterales. Centró Carvajal desde la derecha y Monreal puso la pelota en la esquina con suavidad en lugar de reventarla como les suele pedir el cuerpo a los defensas que se animan a explorar el área contraria.

Llegaba el tiempo de los homenajes y Lopetegui decidió premiar a Callejón, granadino en Granada, para que pudiera vestir la camiseta de la Roja en su casa. Tuvo también su oportunidad el jugador del Nápoles para marcar en los últimos minutos, pero se quedó a medio camino entre el disparo y un pase a Aduriz que aparecía por su izquierda y la pelota se perdió por la línea de fondo. El trabajo ya estaba hecho. Los puntos y los goles eran de España, que sigue sumando camino del Mundial.

. Ficha técnica:

4 - España: De Gea; Carvajal, Nacho Fernández, Bartra, Monreal; Busquets, Koke (Isco, m.72), Thiago; Silva, Vitolo (Callejón, m.86) y Morata (Aduriz, m.60).

0 - Macedonia: Dimitrievski, Ristovski, Velkovski, Mojsov, Ristevski, Alioski; Hasani (Gjorgjev, m.86), Bardi, Spirovski (Zhuta, m.60); Nestorovski (Ibraimi, m.83); y Pandev.

Goles: 1-0, m.34: Velkovski en propia puerta. 2-0, m.63: Vitolo. 3-0, m.84: Monreal. 4-0, m.85: Aduriz.

Árbitro: Robert Schörgenhofer (Austria). Amonestó a Alioski (92) por Macedonia.

Incidencias: encuentro del Grupo G de la fase de clasificación al Mundial 2018, disputado en el estadio Nuevo Los Cármenes, ante la presencia de 19.500 espectadores.