Tenis

Zverev desmonta a Medvedev y gana su segundo Masters

El alemán borda el tenis y se impone por 6-4 y 6-4 ante el defensor del título, que llevaba nueve triunfos seguidos

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El nuevo clásico del tenis cambió el ganador habitual. Medvedev le tenía tomada la medida a Zverev y le había derrotado en sus últimos cinco enfrentamientos, todos sus cara a cara de 2020 y 2021, incluido uno hace apenas unos días en la fase de grupos del mismo torneo, el Masters. El alemán estaba preparado para una gran pelea, pero no fue tal porque su superioridad fue manifiesta. El ruso, una roca, un jugador que desespera a sus rivales por todas las vías, la de la resistencia y la del ataque, no estuvo al nivel ni físico ni tenístico, se movió con cierta dificultad y no fue el jugador que es, por eso cedió sin rechistar la corona que había ganado el curso pasado. Después de nueve triunfos consecutivos en las ATP Finals, cayó por 6-4 y 6-4.

Estaban enfrente los dos tenistas que han roto el sueño de Djokovic en este 2021. La temporada del serbio ha sido extraordinaria, con los triunfos en el Open de Australia, Roland Garros y Wimbledon, pero la hazaña que pretendía era colgarse el oro olímpico y llevarse también el Open USA, para firmar así el Golden Slam. Zverev le cortó el camino en Tokio y Medvedev lo hizo en la final de Nueva York. Son los jugadores que más firmemente han plantado cara a los grandes dominadores de los últimos tres lustros, los que empiezan a intuir de verdad que llega el relevo. Se venía un partidazo, pero pronto el gigante nacido en Hamburgo se disparó.

Fue una continuación de lo que había hecho en las semifinales ni más ni menos que contra Djokovic. Bordó el tenis ante el número uno y siguió el mismo camino ante el dos, haciendo bien todas las facetas del juego. Al servicio, impecable, con sus habituales tiros a más de 220 kilómetros por hora con el primer saque y ya cortada la sangría que tuvo hace tiempo con el segundo, que se le atragantaba y hacía que se multiplicaran las dobles faltas. Pero es que también restó de maravilla y profundo para no jugar a merced de lo que dictara el ruso. La forma de generarse su primera pelota de break fue el claro ejemplo: acertó la dirección del saque de su oponente, se lo devolvió con una derecha que le botó en los pies, recuperó pista y desde el centro cargó el revés para tirar un cruzado incontestable. Confirmó esa ruptura y voló desde ahí.

Si el resultado no fue más escandaloso es porque el saque de Medvedev, pese a no ser su mejor día, es letal y con eso le daba para tirar hacia delante. Pero no pudo evitar un nuevo break al comienzo del segundo set y siempre fue a contracorriente. Intentó engancharse en el 3-2, llegó al 40-40, pero Zverev lo solucionó en la red. Resistía desde el fondo el alemán o se lanzaba a por el punto adelante. Manejó todos los registros. Se sumó demasiado tarde el ruso al partido y ni así le dio para recuperar ante un tenista en estado de gracia.

Cierra un año fantástico Zverev con su segundo Masters y el oro olímpico. Le falta dar el salto a un Grand Slam: ya jugó la final del US Open 2020, el torneo sin público por la pandemia, y este curso ha sido semifinalista también en Nueva York y en Roland Garros. Cada vez se le ve más preparado para ello, pasadas ciertas dudas en el arranque de su carrera, cuando todos le señalaban como indiscutible futuro número uno. Pero es que sólo tiene 24 años. Medvedev sí ha dado el paso en los torneos “Grandes” ganando en la Gran Manzana. Seguro que a estos dos tenistas les esperan muchas batalla en el futuro.