Tenis

Medvedev se asoma al abismo ante Auger-Aliassime, pero se medirá en semifinales con Tsitsipas

El ruso salvó una bola de partido en contra en el cuarto set y se impuso por 6-7, 3-6, 7-6, 7-5 y 6-4. El griego arrolló (6-4, 6-3 y 6-2) a Sinner

Medvedev celebra uno de los juegos que se apuntó en el quinto set ante Auger-Aliassime
Medvedev celebra uno de los juegos que se apuntó en el quinto set ante Auger-AliassimeTertius PickardAgencia AP

Daniil Medvedev, a quien se apuntaba de forma casi unánime como favorito después de lo de Djokovic, sigue vivo en Australia. El ruso sufrió como nunca para terminar como casi siempre cuando compite sobre pista dura. Auger-Aliassime le llevó al límite. Tan al borde del abismo que el canadiense llegó a disponer de una bola de partido en el cuarto set que no supo concretar. Medvedev se impuso por 6-7, 3-6, 7-6, 7-5 y 6-4 después de cuatro horas y 42 minutos de lucha titánica.

Con el canadiense hay que contar desde ya para empresas mayores. Auger-Aliassime demostró que tiene tenis para pelear con cualquiera. Su saque y la colección de golpes ganadores que encadenó en los dos primeros sets dejaron a Medvedev con la soga al cuello. En el tercer set se alcanzó el tie-break, pero antes hubo que cerrar el techo de la Rod Laver Arena por la lluvia. El ruso, tan suyo, ni se inmutó. Empezó la escalada, pero estuvo a punto de despeñarse en el décimo juego del cuarto set. Auger-Aliassime lo tuvo ahí. En realidad lo tuvo ahí también en las tres bolas de break que dispuso en el arranque de la quinta manga. Su problema es que enfrente ya estaba el muro. Medvedev apareció en su versión más letal. Ésa en la que lo devuelve todo y en la que es capaz de encontrar golpes ganadores imposibles después de más de cuatro horas de pelea. Y como su ritmo de juego es insoportable, el canadiense tuvo que rendirse. La remontada de Medvedev no se debió a un bajón de Auger-Alliassime. Toda la “culpa” fue del ruso.

Y enfrente el viernes, en el turno de noche, tendrá a Stefanos Tsitsipas después de que el griego jugará su partido “más convincente” en los últimos diez días en Melbourne. Sinner no fue rival y cayó por 6-4, 6-3 y 6-2. El italiano sufrió un atropello. “He estado impecable y estoy muy feliz con la forma en la que he sacado. Contar con el apoyo de la grada es increíble”, explicó sobre la Rod Laver Arena tras cerrar el partido en dos horas y seis minutos. El heleno, que cedió cuatro sets en sus primeros cuatro partidos, mostró el tenis que le hizo campeón de las ATP Finals en 2019. No cedió una bola de break y Sinner estuvo desconocido. Resultó inofensivo para un jugador que llegó a Melbourne envuelto en dudas. “Mi doctor lo ha estado viendo. Me ha estado enviando mensajes durante todo el torneo. Él confiaba en que podría jugar aquí”, aseguró sobre la operación en el codo que vivió a finales de 2021 y que hizo peligrar su presencia en un torneo en el que ahora está en semifinales.

Él será el penúltimo obstáculo para Medvedev que sigue empeñado en hacer historia. Si gana el torneo, el que sería su segundo Grand Slam, se convertirá en número uno y será el primer jugador de la historia que gana su segundo Major inmediatamente después de levantar el primero.