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Bares y restaurantes quieren abrir sin un límite máximo de aforo en la fase 2 de la desescalada

Consideran que la distancia de seguridad debe ser la que marque el número de clientes. Piden que, como mínimo, se eleve el umbral del 40% al 50%

Ambiente en playa y chiringuito de Málaga
Chiringuitos a pie de playa en MálagaÁlex ZeaEuropa Press

Uno de los sectores más impactados por la pandemia del COVID-19 es el hostelero. Bares y restaurantes han pasado semanas cerrados y ahora que poco a poco están recobrando su actividad con la desescalada del confinamiento, lo que aspiran es a recuperar cuanto antes el pleno rendimiento. En este afán, sin embargo, están chocando con los frenos impuestos por el Gobierno, que prefiere ser cauto para evitar rebrotes del virus. Para la fase 2, a la que accederán la mayoría de las comunidades autónomas la próxima semana, el Ejecutivo ha dispuesto que bares y restaurantes puedan abrir ya sus locales -hasta ahora sólo pueden funcionar las terrazas-, pero limitando su capacidad al 40% y sin autoservicio en barra. Pero el sector considera que establecer aforos mínimos es un error.

HOSTELERÍA DE ESPAÑA, la patronal de los fabricantes y los distribuidores de productos del sector (AECOC) y la de industrias de alimentación y bebidas (FIAB), organizaciones que representan a la cadena de valor de la hostelería, han pedido hoy al Gobierno que sea la distancia de seguridad la que marque el aforo de los establecimientos. En cualquier caso, consideran “insuficiente” el 40% de aforo previsto en la Fase 2, por lo que han solicitado ampliar hasta un mínimo del 50% el aforo en el interior de los locales de hostelería “siempre y cuando la distancia de seguridad pueda garantizarse”.

Rápida recuperación

Las tres organizaciones consideran que esta medida, que también ha solicitado el Gobierno vasco al Ejecutivo presidido por Pedro Sánchez, “serviría para acelerar el proceso de recuperación económica y para recobrar parte de la actividad de uno de los sectores más castigados por la crisis provocada por el coronavirus”. La hostelería, según datos de un estudio reciente de EY, podría perder alrededor de 900.000 empleos y más de 54.000 millones de euros hasta final de año si no se recupera el turismo y se ponen en marcha planes de apoyo al sector en la línea de los aprobados en Francia o Italia.

Las organizaciones defienden que la reapertura de los locales se realice “en condiciones de máxima seguridad para trabajadores y clientes”, respetando la distancia social y exigiendo otras medidas como la publicada hoy en el Boletín Oficial del Estado acerca del uso obligatorio de mascarillas cuando no se pueda garantizar una distancia mínima.

Para el presidente de HOSTELERÍA DE ESPAÑA, José Luis Yzuel, “la distancia de seguridad debe ser la que marque la vuelta a la actividad de los negocios hosteleros. Además, es importante incidir en que el uso obligatorio de la mascarilla introduce un elemento nuevo de seguridad, que deja en desuso las franjas horarias que no son aplicables en hostelería y comercios”. El director general de AECOC, José Mª Bonmatí, ha afirmado que “las estrictas medidas contempladas en las guías elaboradas por el sector permiten una apertura segura de los establecimientos tanto para el personal como para los clientes”. Mauricio García de Quevedo, director general de FIAB, ha asegurado que “es imprescindible activar el sector de la hostelería permitiendo ampliar el aforo de los locales con las máximas garantías sanitarias para trabajadores y público”.